Redacción de RiojaLibre
La directora de la carrera de Arte Escénico en el Departamento Humanidades -Viviana Fernández- está en la cuerda floja. Su estabilidad peligra por las crecientes quejas de los alumnos, que cada día que más manifiestan con más dureza su descontento con Fernández.
La Directora lleva dos años de gestión en la carrera de arte escénico en la UNLaR, y en ese lapso lo único que sobresalió fue su mala gestión; ahora sumándose la total falta de apoyo de sus alumnos y docentes de la carrera. Una serie de malas decisiones, sumado a la falta de actividad laboral de la docente, la alejaron completamente de sus dirigidos.
Fernández no quiso darle apoyo a sus alumnos de teatro en el ENET, por negarse estos a darle participación política en el evento, provocando que todos sus alumnos se pongan en contra. Por su parte, el malestar de sus docentes se debe a los manejos poco transparentes -por los pasillos se murmura que ‘beneficia solo a sus docentes amigos’-.
Por si todo esto fuera poco, a Fernández se le achaca ‘abandonar’ a sus ‘menos allegados’: Antacli, Fermani, Mercol, etc.). Pero aquí el dato más preocupante, y que afecta directamente a los alumnos: la Directora solo asiste a trabajar un día a la semana, donde ese mismo día cumple labores de docente y directora. «Prácticamente as imposible encontrarla en la UNLaR ,y mucho menos pedirle soluciones», se quejan los alumnos.
La gota que rebalsó el vaso fue el intento de Fernández de imponer la incorporación de una ‘docente amiga’, sin la antigüedad necesaria, y en desmedro de los docentes con más trayectoria y más respetados en la carrera, que por méritos corresponde la cátedra.
Mientras la Carrera es un infierno, Fernández se dedica a la politiquería y el amiguismo, y lo alumnos siguen sin clases y sin una dirección que los contenga. Tal es el nivel de enojo de alumnos y docentes, que muchos ya comienzan a habla de ‘acefalía’ en la Carrera.