Lo confirmó el gobierno provincial al adherir al decreto firmado por Casa Rosada que hace lo propio con los empleados públicos de sus dependencias y delegaciones en todo el país.
Entre los motivos del decreto nacional, se declara asueto por «su profundo sentido religioso y conmemorativo», ya que «las citadas fechas son celebradas tradicionalmente por la ciudadanía mediante la unión y acercamiento de las familias y grupos» y debido al «traslado de muchos/as ciudadanos/as a distintos puntos de la Provincia y del país a fin de reunirse para celebrarlas».
Cabe recordar que 24 y 31 de diciembre caen sábado, mientras que el 25 -Navidad- y 31 -Año Nuevo-, dos feriados tradicionales de la cultura occidental, este año caerán domingo por lo que se «perderán».
De allí que la administración nacional primero y ahora también la provincial hayan decidido reemplazarlos por las vísperas del 23 y del 30 de diciembre, en lugar de los tradicionales días no laborables para el 24 y 31.