Redacción de RiojaLibre
En la loca vertiginosidad que caracteriza a los medios de comunicación, muchas veces se publican noticias de una magnitud gigante que pierden el valor que realmente tiene el hecho en cuestión. Ayer, en RiojaLibre publicamos una carta anónima de un estudiante que participó en la Toma y denunció que Fabián Calderón y Luis Beder Herrera mantuvieron varios encuentros en pleno proceso de lucha (click aquí).
El diálogo que este estudiante demuestra (comprobándolo con mensajes telefónicos) entre Fabián Calderón y el Gobernador, no hacen más que reforzar la idea de que ‘algunos’ le tomaron el pelo a todo un pueblo que creyó apoyar una lucha pura y desinteresada. La versión oficial indica que Calderón fue elegido ‘improvisadamente’ como Rector por el respaldo de la Asamblea, pero la realidad estaría demostrando que su andar fue digitado paso a paso desde la Casa de las Tejas.
El Interrogante es tan simple de formular como complicado de contestar: ¿Por qué Calderón visitaba al Gobernador a horas de mantener reuniones con Martín Gill y la Asamblea Soberana?. Según pudo averiguar RiojaLibre, no fue sólo un encuentro, sino que el actual Rector visitó en más de tres ocasiones al Gobernador.
¿Qué ganó Calderón con esas reuniones (que muchos la toman como una traición a los estudiantes)? Ocupar el sillón con el que siempre soñó. ¿Qué ganó Beder? Mantener el control y tener una posibilidad concreta de recuperar su imagen en un ámbito clave como el estudiantil.
Tal es el descreimiento y sospecha que rodean al actual Rector, que cada vez cobra más fuerza el rumor sobre una reunión entre Calderón y su gente con Enrique Tello Roldán solo horas antes de la histórica marcha del 8 de Octubre. Al actual Rector le habían entrado las dudas sobre el ‘éxito’ del proceso de lucha y recibió una invitación de Tello Roldán. Al encuentro acudieron Calderón, Gaspanello y muchos otros que hoy están ubicados ‘bien arriba’ en la Casa de Altos Estudios.
Correspondiéndose con los tiempos que corrían, los tellistas obligaron a los calderonistas a estacionar los autos a más de dos cuadras del punto de encuentro; y –antes de ingresar a la oficina de Tello- dejar todos los celulares en un cesto, siendo ‘palpados’ por los colaboradores del ex Rector. Por sus condimentos, resulta difícil creer la veracidad de dicha reunión, pero –a estas alturas- ya nada sorprende; incluso existiría una grabación telefónica que comprobaría este encuentro.
Obviamente, el Gobernador estaba al tanto de la cumbre Tello Roldán-Calderón. La intención era clara: cambiar algo para que nada cambie. Cuando decimos ‘nada’ nos referimos al ‘control’ de la UNLaR. Hoy, el Gobernador tiene la misma situación de control sobre la UNLaR que cuando estaba Tello Roldán.
La gran prueba de ello son los actos que se están llevando a cabo por la ‘Semana de la Memoria’ en la UNLaR. Para aquellos desprevenidos, les informamos que el bederista Pocho Brizuela es el encargado de organizar todos los eventos. La Frutillita del postre sería la visita del mismísimo gobernador a la UNLaR el próximo Lunes, posando junto al flamante Rector para que todos los fotógrafos inmortalicen la prueba cabal del gran Pacto.