Víctor Hugo Raineri, el sacerdote uruguayo cuenta al medio que uno de los delincuentes era un hombre mayor, otro de entre 25 y 30 años y que al tercero no llegó a verlo de cerca.
Uno de los asaltantes pidió confesarse y, tras el desahogo, otro de los hombres apuntó con el arma al párroco. Al guardia, que minutos antes había cerrado la puerta tras la misa, y al cura les dijeron que se arrodillaran, los amordazaron y les robaron documentos, dinero y celulares.
En otro de los rincones de laq igleasia, Raineri estaba conversando con una pareja de novios que se iba a casar este viernes y también fueron robados por uno de los ladrones.
Minutos más tarde, los tres delincuentes se fueron por la puerta trasera. El sacerdote cree que los asaltantes reconocían el lugar y los horarios.