A partir de este sábado, el impuesto que grava al carbono y los combustibles líquidos subirá un 11,8% porque se ajusta en base a la inflación del primer trimestre del año. Y parte de esa alza que deberán afrontar las petroleras se trasladará al precio de las naftas.
Así las cosas, según cálculos de los estacioneros el gasoil subirá un 3% y las naftas un 4%, lo que equivale a una remarcación en el caso del litro de la Súper de entre $1,7 y $3 del valor actual, según la región del país y la petrolera.
Y si bien desde el sector descuentan que la Secretaría de Energía volverá a desdoblar la suba del gravamen, tal como ocurrió en marzo y abril pasado, el alza de todas formas se espera que sea entorno al 4% para el caso de las naftas porque las compañías aducen que el valor está retrasado respecto del barril de crudo Brent, que subió en 5 meses 13,5% en dólares, y además por la inflación y la devaluación del dólar frente al peso, por lo que aplicarían un ajuste del 2% que se sumaría a otro 2% del impuesto, desdoblado.
El presidente de CECHA, Guillermo Lego, remarcó que las petroleras insisten con que el valor de las naftas está rezagado respecto de la cotización internacional y recordó que en marzo Shell intentó aumentar sus combustibles un 9,5% y luego lo redujo a 5% mientras que Axion quiso hacer lo mismo en abril, y tuvo que dar marcha atrás porque YPF salió con un incremento entorno al 4,5%.
«YPF es hoy la petrolera que marca la cancha», subrayó Lego y añadió: «Así quedó flotando que hay un 5% que debería aumentar». Desde las petroleras, salieron a advertir que el precio de la nafta está retrasado entre un 6% y un 20%.
El aumento del impuesto se aplica por decreto y si bien podría salir publicado en el Boletín Oficial el lunes 3 de junio siempre es retroactivo al 1 de cada mes, por lo que las petroleras aplicarán los aumentos desde este sábado 1 de junio.
En la Provincia el consumo de combustibles ya acumula 11 meses consecutivos en baja
El consumo de combustibles en la Provincia volvió a caer en febrero pasado y así el sector registró una baja acumulada que ya lleva 11 meses consecutivos.
En el segundo mes del año, las ventas en las estaciones de servicio de la Provincia bajaron un 9,3% con respecto al mismo mes del año anterior.
En febrero, se consumieron en la Provincia 10.105 metros cúbicos (m3) de combustibles -unos 10,1 millones de litros- tanto de gasoil como de naftas, lo que marcó una baja del 9,3% con respecto a igual mes del año anterior. A su vez, se registró una baja del 3,3% en relación a enero pasado.
Del total de litros de combustible vendidos, un 39% (3.983 m3) corresponde a la comercialización de gasoil y el otro 61% (6.122 m3) a la venta de naftas.
En el caso del gasoil, se vendieron en febrero 2.222 m3 de gasoil común y 1.761 m3 de gasoil ultra.
En tanto, en las naftas, del total vendido se registró un consumo de 4.757 m3 de nafta súper y 1.365 m3 de ultra.
Si se analiza la evolución de la venta mensual del combustible en la Provincia, se advierte una baja del 1,3% en los despachos de gasoil con respecto a enero mientras que se registró una caída del 4,5% en el caso de la venta de naftas, también en relación a enero.
Las cifras oficiales indican que -hasta febrero- en La Rioja ya se acumulan 11 meses consecutivos de caída en el consumo de combustibles. La última suba registrada en el sector fue en marzo de 2018 con respecto a igual mes del año anterior.
Los datos surgen del informe que mensualmente elabora la Secretaria de Energía de la Nación y a los que economiariojana.com.ar tuvo acceso.