Redacción de RiojaLibre
Muy probablemebte, a comienzos de 2021, el joven empresario Martín Menem ni tenía en los planes incursionar en la política. Y mucho menos en la política riojana, ya que -si bien nació en La Rioja- desde su niñez está radicado en Capital Federal.
Precisamente en el Colegio Secundario Manuel Belgrano de Buenos Aires conoció a un tal Javier Milei, con el cual entablaría una relación de amistad que sostendría en el tiempo desde su actividad empresarial. Allí debe encontrarse la explicación a por qué en dos años Martín Menem pudo construir políticamente mucho más que otra centena de dirigentes riojanos que hace décadas vienen militando y trabajando en la Política.
Esa ‘amistad’ con el ‘fenómeno’ Javier Milei le sirvió para en 2021 utilizar su provincia de origen para ir por una banca en la Legislatura, y dos años más tardes escalar al Congreso de la Nación. El triunfo del libertario en el Balotaje le abrió las esperanzas al riojano de nacimiento y porteño por adopción: Milei eligió a un ‘Manolo’ para conducir la Cámara Baja del Congreso de la Nación.
Habrá que ver cómo aprovecha Martín Menem el lugar de privilegio que tiene en la política nacional. Primero deberá descubrirse si sigue con intenciones de construir en la Provincia de cara a la Gobernación en 2027, o si -por la trascendencia del lugar que ocupa- se mete de lleno en la escena nacional, apuntando a un Ministerio o integrar la fórmula presidencial en cuatro años.
Como sea, hay una variable inquebrantable para Menem: su destino estará pegado directamente al del Presidente. Si a Milei le va bien, Martín tendrá posibilidades en 2027; si a Milei le va mal, el paso por la política de Martín habrá sido fugaz.