La dueña de la vivienda, Graciela de Acosta es docente y contó lo ocurrido cuando en la mañana de este miércoles se levantó para ir a su trabajo y se encontró con su casa revuelta.
«Entré a la otra habitación y estaba todo tirado. Desperté a mi marido, mis hijos y vimos que faltaba todo, hasta las Netobooks del gobierno», relató.
Los delincuentes fueron detenidos en otro sector de la ciudad donde vendían las pertenencias de la familia.
En la vivienda viven seis personas, el matrimonio y cuatro hijos. «Al perro lo llevaron a un cuarto del fondo y lo dejaron ahí encerrado», expuso por otro lado.
Por si fuera poco, los delincuentes mataron al gato antes de irse.
En calle Ciudad de Rafaela del barrio Argentino trabajó personal de la Policía y trasladaron desde allí a los malvivientes, uno de los cuales gozaba de libertad condicional.