Sucedió en calle Teniente Primero Ibáñez del barrio Ferroviario de Capital, alrededor de las 4 de la mañana de este viernes, cuando Jimena dormía junto a sus dos hijos de 1 año y 11 meses y de 5 años. La mujer sintió que el techo comenzó a crujir, se despertó y vio que se estaba cayendo.
“Inmediatamente agarre a los chicos y salí corriendo con ellos porque si no nos aplastaba, de hecho la cama de mi hijo de 5 años quedó partida al medio porque cayó ahí”, contó la mujer. Afortunadamente, gracias a su rápida reacción no se lamentaron víctimas, solo pequeños raspones que sufrió Jimena en su rostro por un pedazo de techo que la rozó.
La vivienda es una construcción antigua que le prestaron sus abuelos, pero no tiene columnas y tiene muchas grietas por lo que ya le habían advertido que era peligroso que continuara allí. «Lo que pasa es que yo no tengo otro lugar al que ir, por eso nos quedamos a pesar de que nos dijeron eso», explicó Jimena.
Por el momento la familia se trasladó a la casa de la madre de Jimena, donde están durmiendo en el piso porque no hay espacio. La mujer comentó que no puede pagar un alquiler ya que realiza trabajos temporales limpiando casas, por lo que solicitó la colaboración de las autoridades para construir una habitación en la casa de la madre.