«Esa propuesta no le sirve a Ritondo, no le sirve a Macri y tampoco le sirve a Milei», explicó un diputado macrista al tanto de las negociaciones. «No es un capricho, la Cámara de Diputados se conduce desde la Presidencia porque ahí están los resortes para alcanzar los acuerdos, pasó con Emilio Monzó durante la presidencia de Macri y pasó con Massa en el mandato de Alberto Fernández», explicó la fuente.
La oferta de Karina, para cualquiera que entiende de la dinámica parlamentaria, es casi insultante. El jefe del interbloque es una figura de relieve público sin poder real. Su única prerrogativa es hablar último.
Por eso, Macri mantiene su posición que es necesario que Ritondo sea el presidente de Diputados en lugar de Martín Menem, para darle al gobierno una base política de la que hoy carece. Es un paso menos que la «coalición parlamentaria» que propuso Miguel Pichetto, pero atiende al mismo problema.
Eso es lo más importante. Luego vienen los ministros, que Karina Milei también se niega a entregar a Macri. El ex presidente quiere ubicar a Guillermo Dietrich en la Jefatura de Gabinete en lugar de Nicolás Posse, al que considera un inútil. A María Eugenia Vidal en Capital Humano o la Anses y a Diego Santilli en el Ministerio del Interior.
Como reveló LPO, el ex presidente tiene una pésima opinión sobre la hermana del Presidente a la que en la intimidad califica de manera despectiva como «tarotista», al igual que del principal asesor de Milei, el consultor Santiago Caputo, apuntado por Macri por los negocios oscuros que busca concretar desde el poder.
Milei habló desde el exterior con Macri y se supone que a su regreso avanzarán las negociaciones, luego que cada uno mostrara sus cartas. Pero no está fácil porque como reveló este medio, enfrenta una competencia en su propio partido con Patricia Bullrich por liderar ese proceso.
Bullrich quiere avanzar ya con la idea de la fusión del PRO y LLA, que Macri comparte en el fondo, pero con otros tiempos y sujeta a ver como evoluciona la integración en el gobierno y en diputados. «Nosotros tenemos tres gobernadores, intendentes y más senadores y diputados que ellos, no es tan sencillo integrar las fuerzas», explicó a LPO un dirigente de la primera línea del macrismo.
0
0
