El nuevo golpe a los ya anticuados «cánones de belleza» viene de mano de la población con discapacidad y este es el caso de la modelo australiana Madeline Stuart.
La joven tiene síndrome de Down, un trastorno genético que, según su doctora, le impediría conseguir los desafíos que se le plantean a cualquier adolescente.
CAMBIO DE REGLAS
Ante tal diagnóstico, Madeline decidió que quería romper con lo establecido y alcanzar su sueño de ser modelo.
Para ello, y apoyada por su madre, comenzó una rutina de deporte y dieta saludable que la llevó a perder 20 kilos, para luchar con el sobrepeso típico de esta discapacidad.
Su condición no frenó a la australiana, que a sus 18 años que realizó ya numerosas campañas de modelaje por todo el mundo, la última con EverMaya, una conocida firma norteamericana de carteras de lujo, señala El Mundo.
Además Madeline es bailarina, nadadora y animadora.