Redacción de RiojaLibre
En los pasillos de la UNLaR ha nacido un nuevo ‘apodo’, en este caso para el Decano de Aplicadas: Marcelo ‘Doble Cara’ Martínez. Es que el ya autoprocalamado candidato a Rector siempre estuvo muy cerca de Calderón, pero ahora intenta despegarse.
En la primera gestión de Fabián Calderón como Rector, Martínez estuvo en área de tecnología; luego en el segundo mandato del calderonismo, Martínez ‘asendió’ y fue su ‘mano derecha’ como secretario académico en el rectorado, es decir el asesor principal del rector.
Eso le sirvió para posicionarse como candidato a Decano en 2017, por el espacio ultracalderonista FACU, del que hoy se quiere desprender.
Lo cierto es que Martínez nunca logró construir políticamente ni en su propio departamento, con más internas que el propio espacio de Calderón. Conocido por la poca capacidad de diálogo y consensos, el único ¿mérito? de Marcelo Martínez fue ser el fundador del ‘grupo sushi’ (SÍ, el mismo nombre de la ‘mesa de flamantes’ que asesoraba a Fernando De la Rúa). El Grupo Sushi es un grupo selecto de amigos y colegas de sistemas, que luego se expandió por otros Departamentos.
Martínez no no solo se auto proclama como candidato a Rector, sino que también elige él a dedo a su compañera de fórmula: Sonia Quiroga, una amiga personal de él y de ese grupo de íntimos.
Sonia es conocida dentro de la UNLaR por haber estado en la peores épocas de la gestión de Tello Roldán, e incluso algunas denuncias aseveran que habría arreglado su propio concurso y el de sus amigas para los mayores cargos docentes. Este proceso está atravesando un Juicio que llegó hasta la Justicia Federal.
Martínez-Quiroga ya están lanzados. Con apoyo financiero del Macrismo, serán candidatos en las próximas elecciones de la UNLaR.