Redacción de RiojaLibre
Cuando Teresita Madera debió dejar el Ministerio para asumir su banca en el Congreso Nacional, el Gobernador ‘convenció’ al entonces Intendente de Castro Barros de tomar el lugar. Del Moral era el líder indiscutible del Departamento, gozaba de muy buena imagen y oxigenaría el golpeado Gobierno Bederista. Beder le prometió más poder y ‘protagonismo’ para posicionarse en toda la Provincia de cara a las elecciones del 2015.
Nada de eso pasó. Hoy, quien era su vice intendente -Jorge Robledo- se le reveló y está construyendo su propio espacio político y la división interna pone en riesgo la Intendencia en el 2015, ya que Marcelo Menem está al acecho. Encima, su pasar en el Ministerio es penoso: no maneja fondos, tiene escaso protagonismo (y el poco que tiene es negativo, ya que hasta los medios bederistas lo castigan) y el Gobernador NO lo nominó cuando pronunció sus siete candidatos para sucederlo.
Se sabe que los Planes Argentina Trabaja son la esencia del Ministerio de Desarrollo Social; cada beneficiario es un ‘voto seguro’. Sin embargo, desde Buenos Aires, Tere Madera sostiene el dominio total de estos Programas. Por su parte, la mimada de Beder -Silvia Gaitán, secretaria de Desarrollo Social- funciona como un Ministerio Paralelo. No se trabaja en conjunto, y el Gobernador le brinda más fondos a la Chiliciteña que al mismísimo Ministro.
Es decir, Marcelo Del Moral es Ministro solo para poner la cara en las ‘malas’, porque las ‘buenas’ (Argentina Trabaja y fondos) se las llevan Madera y Gaitán. Seguramente, la fuerte amistad de Del Moral con Minuzzi tenga mucho que ver en este escenario. Consecuentemente, no sorprendería que el Ministro sea el próximo en abandonar el ‘Titanic’ que comanda Beder Herrera.
El colmo del maltrato a sus funcionarios se observó en la mañana de martes, cuando el Gobernador permitió que funcionarios bederistas de Sanagasta aniquilen a Del Moral en la Radio del Ministro de Infraestructura. Lo tragicómico es que mientras en el estudio de Fénix los ‘Aparicio’s Boy’ destrozaban a Del Moral, éste entregaba una vivienda junto a Beder Herrera y el propio Tití Bosetti.
La confusión reina en el Bederedismo. El Gobernador pierde progresivamente las riendas y da la sensación que ‘cualquier cosa’ puede pasar.
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