El dato, que corresponde al tercer trimestre de este año, fue publicado por el Observatorio de la Deuda Social de esa universidad. «Las estimaciones reflejan la persistente infantilización de la pobreza en la Argentina urbana», fue una de las conclusiones del estudio.
En ese sentido, el informe señala que «la pobreza afecta con más intensidad a niños, adolescentes y jóvenes (de 18 a 29 años), y en menor medida a la población activa (30-59 años) y de adultos mayores (60 años y más)». En ese sentido, el 59,5% de la población menor a 17 años es considerada pobre. Entre 18 y 29 años ese porcentaje es de 41,3%. Para la franja etaria de entre 30 y 59 años la pobreza afecta al 36,5%, mientras que de 60 años en adelante, al 13,6%.
El incremento de la pobreza en los más chicos fue de 15 puntos porcentuales en los últimos dos años. Hacia el tercer trimestre de 2017 el 44% de niños y adolescentes no cubría la canasta total. En comparación con 2015, antes del cambio de Gobierno, el aumento fue de poco más de 13 puntos, ya que era de 46,1%.
La UCA además incluye un análisis dividido por estratos económicos. Entre la población activa que es considerada trabajadora «marginal» la pobreza alcanza el 66,4%. En la categoría «obrero integrado» el índice es de 51,8%. Entre los sectores medios la pobreza es mucho menor. Para los trabajadores «medios no profesionales» es de 14,2% mientras que para los «medios profesionales» fue de 0,9%.