“Esa es una idea muy masculina del sexo. Es pensar que la relación sexual consiste en excitación, erección, eyaculación y punto”, explica el sexólogo Jacobo Pastötter.
Una de las diferencias básicas es que la relación sexual en las mujeres no es lineal: existen momentos de mayor y menor excitación. Incluso, algunos especialistas aseguran que el orgasmo puede no ser el momento de más placer.
Otra de las grandes trabas que enfrenta la mujer en la cama es la concepción de que el sexo se reduce al acto de penetrar. En lo que respecta al universo femenino, los juegos previos y la estimulación del clítoris pueden ser más efectivos para llegar al clímax.
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“Las mujeres padecen esos preconceptos equivocados de la sexualidad”, suma la sexóloga Carla Thiele, quien además sugiere que las mujeres suelen también llevarse a la cama las presiones de rendimiento y la obligación de hacer que su pareja alcance el clímax.
La diferencia de orgasmos puede ser un problema en la pareja. Los expertos recomiendan evitar los “reclamos” y enfocarse en el conocimiento de los propios cuerpos, para poder luego guiar al acompañante.
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