“Es complicado tenemos que dejar todo y venirnos a vivir a donde los chicos vayan a recibir el tratamiento (…) sumado a eso la burocracia de la salud pública, hoy nos está costando conseguir la medicación pedirle a la ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica), que le autorice a la droguería a comprar la medicación afuera del país para que le provea a la obra social”, precisó Jamila.
Asimismo mencionó que “es una carrera contra el tiempo, no es gripe, no es una quemadura, no es una quebradura y nosotros tenemos que peregrinar con eso”.
Sin embargo, la mamá dijo que “estoy superagradecida con la obra social es la primera vez en cinco años, y habiendo tenido otra dos obras sociales, hemos recibido tan buena atención y nos escucharon muchas cosas que eran desconocidas”.
Se trata de la obra social del Personal Ladrillero ya que el padre de Lucas, pertenece al programa Argentina Trabaja, es monotributista y tiene esa obra social. También agradeció al Ministerio de Salud de la provincia.
Cabe recordar que Lucas fue diagnosticado con Leucemia Linfoblástica aguda tipo B, se lo detectaron cuando tenia tres años, realizó el tratamiento y en la ultima punción que le daría el alta, los médicos notaron una anomalía en su testículo izquierdo.