Aproximadamente a las 11 de hoy, el fotógrafo Ramiro Pereyra, de este diario, fue a realizar una cobertura al predio de la localidad de Malvinas Argentinas, donde los ambientalistas realizan un acampe para impedir la instalación de la multinacional.
Cuando estaba haciendo las tomas, se acercó una muer y le dijo que no sacara fotos. Tras identificarse, Pereyra continuó haciendo su trabajo y le explicó que necesitaba hacer fotos del lugar y del acampe con el fondo de la obra de Monsanto, actualmente paralizada.
También afirmó el fotógrafo que su tarea no perjudicaba a nadie.
Instantes después, se acercaron cuatro hombres con los rostros tapados y le exigieron que no sacara más fotos. Además, lo obligaron a borrar las tomas que ya había realizado.
“Si no borrás las fotos, no salís”, amenazaron los cuatro supuestos ambientalistas.
Pereyra volvió a explicarles que no estaba haciendo nada extraño, sólo trabajando y haciendo una cobertura gráfica.
Sin embargo, los cuatro hombres no cambiaron de postura, razón por la cual el fotógrafo debió borrar lo que había registrado, volvió al remise en el que se había trasladado y retornó a la sede del diario.