En esa línea, emitieron un comunicado donde advirten que «en este contexto de alta inflación los costos impactan desproporcionalmente con relación a los alicaídos ingresos cuyos valores por prestaciones médicas y sanatoriales, se encuentran gravemente atrasados y con una demora en la cadena de pagos en promedio de más de 60 días y sin actualización de precios. Estas condiciones inevitablemente generan un desfinanciamiento que no tardará en poner en situación de quiebra a las Instituciones de Salud Privadas».
Luego, la misiva agrega que «es imperioso recordar una vez más, que los prestadores nos encontramos haciendo todo lo posible para continuar prestando los servicios médicos en pos de garantizar el acceso de salud a nuestros pacientes y mantener las fuentes de trabajo, pero todas las acciones que se llevan a cabo son insuficientes si no se generan cambios en el proceder de los financiadores para proteger a sus afiliados».
La Agrupación de Clínicas y Sanatorios Privados de La Rioja se encuentra abocada a la búsqueda de soluciones, solicitando ante financiadores (obras sociales, prepagas y aseguradoras) respuestas justas y equitativas a la realidad del sector. También la participación e intermediación de autoridades gubernamentales correspondientes para propiciar consensos y equilibrios a fin de sostener esta actividad tan esencial como es la salud».
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