El siguiente ensayo fue escrito por Guillermo Pereyra, estudiante de Licenciatura en Ciencias Políticas:
SEGUIREMOS EN LA LUCHA
Fue una de las frases que me dijo una compañera mientras conversábamos sobre los atropellos que se están viviendo nuevamente en la UNLaR en nombre de la “nueva democracia” pero con viejas prácticas.
Que utilicen los mismos métodos no es azar ni casualidad, Tello Roldán no solo les dejó el esquema de una estructura y un entramado institucional tan oscuro como nefasto para la educación pública, sino que muchos de los que hoy gobiernan o fueron sus aprendices o fueron sus obreros, en la mayoría de los casos por más de veintiún años; los paracaidistas nuevos no tienen más que escuchar, aprenderlo y accionar.
Cuando en los albores de LA TOMA la efervescencia nos unía pedimos DEMOCRACIA, y entendíamos que podríamos alcanzarla no solo con elecciones, sino con decisiones, decisiones concretas como dejar de actuar de manera corrupta, dejar de despedir a nuestros docentes, dejar de malversar fondos públicos, abrir concursos, dejarnos ser libres, y lo más importante, dejar de utilizar falsos resultados electorales para decidir arbitrariamente y bajo la excusa de la mayoría electoral actuar en desmedro de la educación pública y nuestra profesionalización.
Luego de la charla, me surgió un interrogante que intentaré auto responderme en base nuevos objetivos.
¿QUÉ LUCHA?
Como estudiantes comprometidos, hemos dejado el alma en LA TOMA, hemos dado lo mejor en el proceso de normalización para ser NOSOTROS los verdaderos garantes de ello; hoy los desafíos y las injusticias nos vuelven a unir, como aquel septiembre del 2013 en el que nadie nos creía, cuando nos acusaban de opositores, desestabilizadores, terroristas; hoy “troskos”, “zurditos”, “pendejos de mierda”.
Somos los hijos de un pueblo pobre y olvidado, buscamos en las aulas luchar contra la mediocridad, buscamos en los pasillos luchar contra los atropellos de quienes detentan el poder y se enriquecen a costa de miles y miles de trabajadores que ponen a diario su fe en nosotros, buscamos devolverles con estudio, con dedicación, con esmero y agradecimiento la oportunidad que ellos y solo ellos nos brindan a todos. Recibir el título es apenas una condecoración, ser verdaderos ciudadanos profesionales al servicio del pueblo es la única y la mejor forma de rendirles homenaje.
Es cierto, seguiremos luchando…
El artículo 16 de la Constitución Nacional reza: […] todos sus habitantes son iguales ante la ley, y admisibles en los empleos sin otra condición que la idoneidad […], la tan cuestionada Ley de Educación Superior ratifica este artículo para que aquellos docentes que con el tempo han adquirido la experiencia suficiente puedan transmitir su conocimiento frente a cátedras. Hoy en la Universidad Nacional de La Rioja, aquellos docentes idóneos que no poseen título de grado están siendo cesanteados u obligados a renunciar después de años y años al servicio de la educación, para ser reemplazados por docentes con titulación de grado. De forma arbitraria, coercitiva y dedocrática, ya que NINGUNO de los “profesionales” ocuparán esos cargos bajo un régimen de concurso docente por antecedente y oposición, sino que serán designados a dedo por la autoridad de turno.
Seguiremos en la lucha porque a 16 meses del primer grito de libertad en los pasillos de la UNLaR, no se ha efectivizado NI UN CONCURSO DOCENTE.
Seguiremos en la lucha porque aun somos utilizados como caballito de batalla para el logro intereses corporativos y egoístas.
Seguiremos en la lucha por que hasta la fecha no se ha realizado NI UNA ELECCIÓN DE CENTROS DE ESTUDIANTES; pilares fundamentales de la organización estudiantil en defensa de los derechos, pues temen a la organización estudiantil, temen a un nuevo despertar, temen al librepensamiento.
Seguiremos en la lucha porque mientras haya injusticias y opresiones, la juventud estará de pie.
Pues a ellos los moviliza la AMBICIÓN, a nosotros LA ESPERANZA.
Pereyra R. Guillermo.
Estudiante de la Lic. en Ciencia Política.
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