En un encuentro realizado en el Congreso, siete gobernadores y los bloques de diputados y senadores de Unión por la Patria comenzaron a organizar la resistencia a la ley Omnibus del presidente Javier Milei, que entre cientos de cuestiones incluye una muy amplia delegación de facultades legislativas hasta fines de 2015, con posibilidad de prórroga hasta fin del mandato en 2027. Si se le suma a eso el mega DNU de días atrás, se asemeja mucho a un cierre del Congreso. En definitiva, sin la peluca libertaria, el gobierno sería autocrático. «Ante el plan de ajuste económico, el DNU inconstitucional y un paquete de leyes que pretende afectar la vida y los derechos de millones de argentinos reafirmamos nuestro compromiso con la democracia, la división de poderes y la Constitución Nacional», expresó el gobernador bonaerense Axel Kicillof. Lo que más destacaron todos los que participaron de la reunión fue la unidad férrea que mantiene la principal oposición ante la brutal ofensiva del Ejecutivo contra el Legislativo.
En rigor, la reunión estaba convocada de antes para discutir la estrategia frente al decretazo y la intención del Gobierno de dar marcha atrás con la eliminación del impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría, que los gobernadores quieren que sea reemplazada por la coparticipación del impuesto al Cheque. Estaban en eso cuando se enteraron del ingreso de la ley Omnibus, pomposamente denominada «Bases y puntos de partida para la libertad de los argentinos», recibida con un moño por el presidente de la Cámara baja, Martín Menem, que vino a agravar el cuadro general.
Otros 800 artículos de derogaciones y reformas, que junto con los más de 300 del DNU vienen a conformar una reforma constitucional de facto. «Nos manifestamos en contra de la ‘Ley Ómnibus’ enviada por el presidente al congreso ya que transgrede las facultades establecidas para el Ejecutivo», afirmó el gobernador riojano Ricardo Quintela luego de la reunión. En el comunicado posterior, los legisladores plantearon el objetivo de «la vocación de articulación permanente para ejercer la representación política de los millones de argentinos y argentinas que se expresaron detrás de Unión por la Patria en las elecciones de octubre y noviembre».
Además de Kicillof y Quintela, estuvieron el gobernador pampeano Sergio Ziliotto, el formoseño Gildo Insfrán, el vicegobernador catamarqueño Rubén Dusso mientras que el santiagueño Gerardo Zamora participó vía zoom. El encuentro fue en el tercer piso del Congreso, donde hicieron de anfitriones los jefes de los bloques Germán Martínez y Cecilia Moreau, por diputados, y los senadores José Mayans y Juliana Di Tullio. Pero participaron muchos otros como Eduardo Valdés, Leandro Santoro, Paula Penacca, Carlos Heller, Eduardo «Wado» de Pedro y Anabel Fernández Sagasti, por citar algunos.
Los gobernadores, legisladores y legisladoras de @unionxlapatria nos reunimos para organizarnos para representar a todas y todos los que confían en que hay un camino posible para nuestro país que no perjudique ni vulnere los derechos de los trabajadores y trabajadoras.
— Ricardo Quintela (@QuintelaRicardo) December 28, 2023
Nos…
El nuevo proyecto declara la emergencia pública en materia económica, financiera, fiscal, previsional, de seguridad, defensa, tarifaria, energética, sanitaria, administrativa y social hasta el 31 de diciembre de 2025, por lo que exige la delegación de las facultades legislativas. Unión por la Patria cuenta con los bloques mayoritarios en Senado y en Diputados, lugares que -argumentan- fueron tan legítimamente votados por la gente como Milei para ejercer la presidencia. «Viola los principios más básicos de nuestro sistema republicano, representativo y federal», afirmó Wado de Pedro.
En los bloques de Unión por la Patria confiaban en sumar respaldos de otras bancadas opositoras ante semejante ofensiva contra el Parlamento. Para empezar, a los partidos provinciales que gobiernan Misiones, Río Negro, Neuquén y Salta, aunque en este último caso el gobernador Gustavo Sáenz confirmó a Flavia Royón como secretaria de Minería. El radicalismo volvió a poner el acento en las formas más que en el contenido, en el que insisten que están en gran medida de acuerdo.
«Ofrecemos distintas alternativas que le darían mayor sustentabilidad normativa y seguridad jurídica», sostuvo el jefe del bloque de la UCR, Rodrigo de Loredo. Luego del ofrecimiento radical de tratar en una ley «espejo» el mega DNU, Milei habló de quienes buscaban cobrar coimas al trabar el tratamiento legislativo. El radicalismo suele ser uno de sus blancos predilectos.
Una novedad del Congreso fue la unión en interbloque de tres bancadas: la Coalición Cívica, Cambio Federal y Hacemos por el País bajo la conducción de Miguel Angel Pichetto, quien días atrás se había expresado contra el DNU. «Esto es una república, el Presidente debe gobernar con el Congreso», había advertido. El nuevo interbloque contará con 23 integrantes y en un panorama tan fraccionado podría resultar clave para conseguir quórum y sanciones de leyes. Respecto a la ley omnibus, Maxi Ferraro, de la Coalición Cívica, subió un video contra los «superpoderes» a Alberto Fernández. «No más preguntas señor Juez», ironizó.
Pero antes de repasar los posibles aliados, en Unión por la Patria destacaban la importancia de mantener la unidad interna. Algo que pudo constatarse en los encuentros posteriores a la dura derrota en el balotaje como el que organizó Kicillof en La Plata del que participaron Sergio Massa y Máximo Kirchner. También destacaban la muy buena marcha de la CGT, las CTA y los movimientos sociales ayer a Tribunales. La mancha, lamentaban, fue la inoportuna foto del veterano secretario de los Empleados de Comercio, Armando Cavalieri, que se mostró junto a la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, adhiriendo al «modelo Uocra» para las indemnizaciones incluido en el mega DNU, conformado por un «fondo de cese laboral» que comenzará a conformarse con el convenio colectivo de enero.
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