Con 360 despidos y el cierre de una planta clave, el futuro del calzado argentino queda en jaque

El cierre de la planta de Dass en Coronel Suárez marca un nuevo capítulo en la devastación industrial argentina. La empresa, que durante décadas fue una de las principales generadoras de empleo en la región, despidió a 300 trabajadores, dejando a una comunidad en estado de emergencia social y económica. Este golpe se inscribe en un panorama nacional cada vez más sombrío para la industria, resultado directo de las políticas económicas implementadas por el gobierno de Javier Milei.