En Sala de Situaciones del Palacio Municipal, Ricardo Quintela encabezó una nueva entrega herramientas de trabajo a empleados, gestionados por la Dirección de asuntos vecinales. Luego, emitió un mensaje cargado de contenido social a los presentes.
“La Rioja –comenzó- está pasando una situación social bastante delicada, donde existen serias dificultades para nuestra Ciudad, que alberga cerca de 230 mil habitantes, mucho de ellos ciudadanos que vienen de otros lados a buscar oportunidades para ellos y sus familias”.
Quintela aseveró que “eso genera impotencia, porque estamos viendo que paulatinamente una mayor cantidad de ciudadanos están incorporándose a la pobreza, porque no les alcanza para pagar la olla, para alimentar a sus hijos y tener una vida digna”. “Se está evitando una paritaria social, con acuerdo y diálogo con todos los sectores, sobre todo los más vulnerables; hay que tomar conciencia porque ahí comienza la solución a los problemas que estamos atravesando”, agregó.
El mandatario consideró que “se necesita ver a la política como un esquema de distribución para mejorar la calidad de vida, de manera armónica; todos nos tenemos que hacer cargo de que se necesita una política distributiva y equitativa”.
“A La Rioja –profundizó- no le faltan recursos, la Provincia está recibiendo muchísimos fondos: el presupuesto de este año para La Rioja es de 13 mil millones de pesos, lo que hace un promedio de 1.100 millones de pesos mensuales”. Inmediatamente, se extendió: “ese presupuesto creció casi un 1000% desde que el Gobernador arribó al poder; sin embargo, el presupuesto de la Ciudad es de 700 Millones de pesos, con apenas 435 millones que vienen del Gobierno Provincial, es decir que solo recibimos un 3% del presupuesto de la Provincia. Es algo inaudito, que no se ve en ningún otro lugar”.
Quintela enfatizó que “La Rioja es la segunda provincia más beneficiada por el Gobierno Nacional, solo detrás de Santa Cruz, y a pesar de eso tenemos los salarios más bajos de la Argentina; si no somos los últimos somos los penúltimos”. “Genera mucha impotencia ver lo que pasa y no poder resolver los Problemas que tienen los ciudadanos”, insistió.
Convencido de sus palabras, aseguró que “no se puede gobernar desde la improvisación, tiene que haber políticas definidas y cada uno tiene que atender lo que le corresponde; eso no sucede en la Provincia de La Rioja, no hay previsibilidad en las políticas”. “Así como nadie nos puede hablar de peronismo, a mi nadie me puede hablar de la pobreza, porque la conozco bien”, arremetió.
El mandatario pidió que “el Gobierno abra sus oídos, abra su corazón y escuche los reclamos de la gente; este es un Gobierno con funcionarios que no escuchan”. “El Gobierno tiene que actuar concienzudamente, porque sino está dejando que paulatinamente se agrave la crisis social”, añadió.
A su tiempo, Quintela sostuvo que “existe una nueva clase de burguesía en La Rioja, que va en contraposición con la profunda crisis que estamos viviendo”. “Uno pide, pide, y no lo escuchan, creo que el pueblo de La Rioja ha demostrado tener paciencia, pero si no lo escuchan cada vez que reclaman, esa paciencia se agota; los recursos están, que nadie se deje engañar por los gobernantes de turno, los recursos están pero no los distribuyen”, advirtió.
Finalmente, reflexionó: “no hay ningún iluminado que nos vaya a salvar, depende de cada uno de nosotros que nos comprometamos y luchemos para que estemos todos incluidos, en La Rioja hay cada vez más gente excluida”. “Hay que darle una vuelta de campana a nuestra Provincia, la gente nos tiene que ayudar para que podamos lograrlo”, culminó.