El motivo principal de esta propuesta aceptada por parte del Rector y vicerrector, es que dos de los desaparecidos riojanos durante el proceso militar fueron trabajadores no docentes de la UNLaR. “Dos de los desaparecidos riojanos eran no docentes de la Universidad, y siempre fueron negados. Desaparecieron dos veces Minué y Díaz Romero, la primera en la dictadura, y la segunda cuando los olvidaron” manifestó Brizuela.
Los detalles de la conmemoración se definirán en estas semanas, aunque el secretario de Derechos Humanos adelantó que existe la posibilidad de formar un panel de debate con personalidades nacionales. También se involucrarán las carreras humanísticas con intervenciones y performances artísticas.
“La participación de los jóvenes, siempre fresca, es necesaria para estos sucesos” afirmó. En este sentido apuntó que esta actividad no será la única en la que la Secretaria de Derechos Humanos trabaje en conjunto con la comunidad universitaria, Brizuela comentó que le parecería muy enriquecedor para el debate de “temas candentes” la colaboración recíproca con la Universidad como usina de conocimiento. Algunos de los posibles temas de debate serían la violencia familiar, la relación con los países limítrofes, la penalización de ciertas acciones y demás.
“Nos costó mucho llegar a la Universidad todos estos años, y por fin, gracias al ejemplo de proceso democratizador que dieron, podemos hacerlo” concluyó el secretario.