La denunciante, comentó la letrada, manifestó que Elizondo la arrojó desde un vehículo. Sin embargo, señaló, el médico que la atendió luego de que ella expusiera el hecho, “no pudo constatar en la víctima, ni siquiera un hematoma”. Asimismo, la querella no pudo aportar testimonios, ni el registro de las cámaras de seguridad, siendo que este sucedo habría ocurrido en plena tarde en una calle muy transitada del centro de la Capital, remarcó.
Además, luego de esa denuncia, el Juzgado de Violencia de Género dictó una medida de prohibición de acercamiento y de comunicación, que Gabriela Cortez, la denunciante, aseguró que el Jefe de Policía había vulnerado la misma, “pero no logró comprobarlo en la causa”. En tanto que la defensa, sí comprobó que Cortéz le envió mensajes de texto al Comisario, para mantener relaciones sexuales con él, reveló la letrada.
Asimismo, Espeche comentó que la mujer está legalmente casada y además, no logró comprobar una relación sentimental con Elizondo, quien la habría rechazado luego de algunos encuentros, por su condición civil. “Ante la negativa de mantener una relación sentimental en virtud de que es una mujer casada, empieza a hacer publicaciones maliciosas con el fin de dimafarlo y obtener como resultado el apartamiento de sus funciones”, disaparó
También, la letrada contó que se le realizó una pericia psicológica al efectivo policial, y el resultado arroja que su perfil psicológico, “es incompatible con la comisión de este tipo de delitos de género”, sostuvo y mencionó que la denunciante fue citada en tres oportunidades a realizarse dicha pericia y nunca accedió.
La querella está solicitando el apartamiento de la función de Elizondo, dijo y aseguró: “esa petición es totalmente carenta de sustento legal, porque ninguno de los hechos han sido probados”, remarcó.