Redacción de RiojaLibre
En Casa de las Tejas están convencidos que -políticamente- Néstor Bosetti NO suma, y -por el contrario- resta muchísimo. Lo único destacado que tuvo el bosettismo en las últimas elecciones, ya fue ‘arrebatado’ por el PJ: la Concejal Ximena Marenco y sus 4.500 votos con proyección ascendente. Sin esos votos de Marenco, el ex Vicegobernador se queda con cuatro mil y chirolas votos, que son los que obtuvo el 4 de Junio de 2017.
Ese caudal bajísimo de votos, más el hecho de ser el dirigente capitalino con mayor imagen negativa, hacen que Bosetti no sea bienvenido en esta nueva era del oficialismo Provincial. Sin embargo, Tití cuenta con un Multimedio que tiene una audiencia importante, y negarla sería de necios.
Casa de las Tejas no tenía problemas en llegar a buen puerto con el Multimedio, pero sabía que se trata de un combo inseperable: arreglar con Fénix singifica arreglar políticamente con Bosetti.
Ante ello, el Oficialismo tenía solo dos opciones: todo bien o todo mal con Tití, sin poder separar ‘comunicación’ de ‘armado político’.
En la primer variable (‘todo bien’), la Radio se volvería Q de la noche a la mañana, y no habría ningún tropiezo comunicacional para el Gobierno; pero eso implicaba ‘sumar’ a la figura política de Néstor Bosetti. El año que viene hay elecciones para Diputados Provinciales, y el ex Vicegobernador hará lo mismo que en 2017 y 2019: sin entender que el bien del Partido está por delante del bien propio, saldrá con lista propia por una banca en la Legislatura, quizás su última chance para sobrevivir en la política riojana.
Es decir, en la opción ‘todo bien’, en 2021 el Oficialismo tendría una lista encabezada por Bosetti que le disputaría votos ‘propios’. Los mismos votos que fueron fundamentales para que a Tere Madera no le alcanzara para vencer a Inés Brizuela y Doria.
En la otra variable, la de ‘todo mal’, el Gobierno deberá soportar embestidas mediáticas del Multimedio, pero -políticamente- le ‘regala’ el problema a la oposición. Las elecciones 2021 llegarán con casi dos años de el bosettismo pegándole duro al oficialismo, y consolidándose como un espacio opositor.
Aunque Casa de las Tejas elija –acertadamente- la indiferencia para responder los embates de Bosetti, medios ‘amigos’ o referentes políticos menores le contestarán y confrontarán, y para la ciudadanía identificará a Bosetti como un referente opositor.
Será entonces, cuando Bosetti dispute el voto opositor con Inés y Felipe. El riesgo para el oficialismo sería una lista única en la oposición con el candidato de inés primero, el de Felipe segundo y Bosetti tercero. ¿Soportaría Tití ir por debajo de -por ejemplo- Galván y Narváez?
Con Tití presente, no habrá unidad en la oposición; solo basta repasar lo sucedido en los últimos años para descubrir que Bosetti es antónimo de Unidad. Consecuentemente, el 2021 los capitalinos deberán elegir entre oficialismo (Quintela) y la oposición dividida en tres: Inés, Felipe y Tití.
Lo que sucede con el Multimedio del ex Vicegobernador no se trata de una cuestión mediática, sino estrictamente de Política. El armado para el 2021 ya está en marcha, y Casa de las Tejas elige cuáles serán sus rivales.
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