“Son jornadas nefastas para nosotros. Yo la vivi en mi el barrio Ferroviario donde vivía y el 24 de marzo significó el terror para todo el barrio. Hubo mucha gente detenida ese dia. Recuerdo que las monjas del Divino Maestro, llamaron y tratamos de reflejar el terror que vivimos como barrio”, recordó sobre el 24 de marzo de 1976, día en que se produjo el Golpe de Estado.
El ex preso político de la dictadura militar hizo una reflexión al aire de Radio Fénix en el marco de la conmemoración de la época sangrienta. “Todas las personas que no estábamos de acuerdo con las políticas de Estados Unidos, entrabamos a ser enemigos”, comentó.
“Desde ese momento, todos los que pensaban distinto eran peligrosos para la política de seguridad nacional de Estados Unidos que no quería que una nueva Cuba se posicionara en los lugares que ellos consideraban dominados”, expresó.
“La tortura fue indiscriminada”, sostuvo, acentuando en el rotulo de comunistas con el que eran tildados por las fuerzas armadas. Olivera fue detenido antes del golpe junto a su padre. “Durante diez días me tuvieron interrogando, golpeándome, torturándome en la cárcel y el 24 Milani me llevó a declarar”.
“Alli, en la misma sala del Juzgado, me acusaron de guerrillero”, afirmó. Luego lo derivaron la cárcel de La plata, donde “todos vivíamos con una Espada de Damoples en nuestras cabezas. Nos sacaban de noche a celdas de castigo y casi me matan”.
“Si conversábamos, si hablábamos bajo con los compañeros, creían que estábamos tramando algo y por la noche nos sacaban a los calabozos”, graficó. “Los compañeros de La Plata quedaban en libertad y cuando salían los mataban”, aseguró.
Olivera fue detenido el 14 de marzo de 1977, luego que el 12 de ese mismo mes y año lo detuvieron a su padre. Tenía 21 años cuando fue detenido por el entonces oficial de inteligencia Cesar Milani que tenía alrededor de 23 años.
“El servicio de inteligencia fue preparado en las escuelas para las Americas, donde se convirtieron en instructores del resto de la fuerza. Instruyeron de cómo eran las técnicas de interrogatorio. Entonces Milani no era con sus 23 años, un desinformado”, expuso.
Acusó que Milani lo “apremió en el Juzgado Federal. No era lo mismo que cualquier otro oficial que no supiese nada. Es el que llevó adelante la represión y el genocidio en nuestro país y en todos los países”.“Lo que pasó en Argentina no solo paso en Argentina sino en Bolivia, Uruguay y Chile”, aclaró.
“No tengo ninguna duda de mi denuncia que fue en el 1979. En la sala del juzgado, el secretario del juez federal Roberto Catalan, Armati, me tomo la declaración y ahí estuvo Milani, agrediéndome, insultándome y cosas asi”, recordó.
Comentó que Armati le preguntó cómo se llamaba y él le respondió “Milani”. Cuando lo fue a denunciar, lo hizo contra el por entonces teniente Milani, hoy general del cuerpo del Ejército Argentino. “Era como un oficial nazi, alto y rubio”, expuso sobre sus recuerdos.
Recordó también que cuando fue el allanamiento en su casa, “la imagen la grabé yo, mis hermanos y mi madre”. Sobre la indiferencia de los militantes de causas sociales y de DD.HH a nivel nacional respecto de su denuncia, Olivera dijo que “me molesta. Repudio y rechazo esa actitud. Creo que Cristina no está actuando en este caso como una mujer que analice la política interior y exterior como corresponde”. “Si ella analizara eso, sabría que si Milani es un oficial del servicio de inteligencia, no puedo ponerlo como jefe del Ejército, como un principio elemental”.
“Yo no sabía que este hombre venia ascendiendo e inclusivo el CELS aprobó los pliegos. Cuando me entero que en el Nunca Más, publicado, una vez ya tengo los testimonios y tengo que dar otra consideración a ese tema”, fustigó.
A su entender, “el Gobierno comenzó a analizar la interna con la oposición que cuando pide que renuncie un funcionario, lo atornillan, pero está pagando un costo político muy grande”.El juez federal de La Rioja, entendió es quien debe decidir sobre el sobreseimiento de Milani o la imputación. “Es una tremenda decisión la de imputar a Milani o sobreseerlo”. Cabe destacar que Olivera no es el único que denuncia a Milani, sino también Plutarco Schaller y Matta.