Redacción de RiojaLibre
En la entrevista que Julio Martínez brindó ayer a una radio porteña, el diálogo termina con el Senador riojano desafiando a Juan Amorín: «no tenga dudas de que Macri va a ganar, y vamos a sacar el País adelante».
Cuando desde RL decimos que #JulioMartinezesMacri no solo nos referimos a ese fanatismo obstinado que el Riojano tiene por el Presidente, sino a la concepción política y económica que ambos coinciden. Julio Martínez y Marucio Macri tienen la misma ideología, la misma concepción económica de un Gobierno y -por ende- de una sociedad.
Para la concepción del Gobierno Nacional, el ‘empleado público’ es un gasto y no una inversión. El economista Martín Tetaz (es al Macrismo lo que Roberto Navarro es al Kirchnerismo) ofició hace unas semanas de vocero y sostuvo que «en La Rioja el 67% de la masa laboral corresponde a empleados públicos». «El gran desafío es reducir esa cifra», agregó.
Vale recordar que el acuerdo del Gobierno Nacional con el FMI tuvo como una de las condiciones la reducción del gasto público para controlar el déficit fiscal. El gran trascendido por ese entonces, confirmado más adelante por el propio Gobernador Sergio Casas, fue que ‘Macri le pidió a Sergio Casas que se deshiciera de 20.000 empleados estatales’.
El Gobernador riojano no cesaba en la lucha por más fondos para la Provincia, y la respuesta de Nación fue tan clara como carente de sensibilidad social: ‘más plata no tenemos, te vamos a pasar lo mismo, echá a 20.000 empleados públicos y te va a sobrar la plata’.
Esa concepción económica de Macri y Martínez fue ratificada públicamente hace algunas semanas por el economista Martín Tetaz: «hay provincias que tiene más de sus dos terceras partes con empleados Públicos, La Rioja tiene 67%». «El gran desafío del Gobierno Nacional, y para eso incorporó a Pichetto (define los Presupuestos de las Provincias desde el Senado) es reducir esa cifra».
La deducción no es tan complicada de dilucidar: el primer desafío que tendrá Julio Martínez si logra ganar la Gobernación será ‘concretar’ esa reducción de 20.000 trabajadores en la administración Pública.
El Macrismo ya se lo pidió a Casas el año pasado, y el Gobernador se opuso tajantemente; a partir de allí comenzó el distanciamiento definitivo del Gobierno Provincial con su par Nacional. Si se le cumple el sueño, apenas asumido como Gobernador, Julio Martínez que -según sus propios dichos- comparte la concepción económica de Macri, comenzará a hacer en La Rioja lo que Macri hizo en el País.
Las primeras víctimas serán esos 20 mil empleados que -para el macrismo- sobran en el Estado riojano.