El Ministerio de Justicia bajo el justificativo de que habrían sido contratados con “criterios políticos” echó a 500 trabajadores, 55 de los cuales cumplían funciones en el predio de la ex ESMA. Infojus, el portal de noticias jurídicas de la cartera de Justicia también despidió a una decena de periodistas, fotógrafos y productores audiovisuales que cubrían temáticas relacionadas al seguimiento de juicios por delitos de lesa humanidad.
En el Ministerio de Cultura hicieron efectivos despidos y anunciaron otras tandas más de empleados que perderán sus trabajos, lo que se suma a una tendencia generalizada en la administración pública desde que Cambiemos asumió el gobierno.
Cuatrocientos noventa y ocho empleados que revistaban en la cartera conducida por Germán Garavano recibieron telegramas de despido en los últimos días bajo el confuso argumento de que habrían sido incorporados a la planta «obedeciendo a criterios políticos», después de julio de 2015 y que otros jamás se habían presentado a trabajar. Más del 10% de los echados trabajaban en la Secretaría de Derechos Humanos con funciones asignadas en la ex ESMA.
Los desplazados, agrupados en ATE, reclamaron su reincorporación y alertaron que todos prestaban efectivamente sus funciones, hecho corroborable con las tarjetas magnéticas de ingreso a las oficinas.
Los despedidos trabajaban en la Dirección Nacional de Atención a Grupos en Situación de Vulnerabilidad, en el Registro Unificado de Víctimas de Terrorismo de Estado, en la Dirección de Gestión de Políticas Reparatorias, en el Archivo de la Memoria y como personal a cargo de las visitas guiadas de la ex ESMA.
En Infojus se declararon en asamblea permanente tras los despidos de diez editores, redactores, fotógrafos, productores audiovisuales y redactores del área de redes sociales que representan el 25% del total de los empleados. Les comunicaron informalmente la baja luego de que se presentaran a sus tareas y encontraran los usuarios de sus computadoras bloqueados.
Las nuevas autoridades de la Dirección de Prensa del Ministerio de Cultura confirmaron dos despidos al personal contratado que se anticipan a otros que involucrarán a los contratados durante 2015, bajo cualquier modalidad y de todas las dependencias.
Estos casos se sumaron a los tres despedidos del área de prensa producidos en diciembre, a los 26 del CEPIA (que fue desactivado), a los 600 del Centro Cultural Kirchner y a quien estaba a cargo del Programa de Afrodescendientes, anunciado en el último fin de semana.