Editorial: “Hoy ninguna fórmula que encabece Casas tiene posibilidades de ganar”, matemática electoral y peronismo
Matemática electoral y Peronismo, es lo que aparece a partir de acallada las voces de las distintas estrategias que llevaron a delante cada sector político de la provincia que pretende alzarse con el poder real del gobierno. Planteado esto así, empiezan a aparecer las fortalezas y debilidades de cada acción política.
Por el lado del bederismo las chances de seguir gobernando se agotan en el mismo momento en que Beder Herrera no pudo llegar a imponer su proyecto reeleccionista, desde ahí, la suerte de cualquier sucesor siempre estuvo echada. El 8 M fue un ensayo para saber simplemente cuanto seguía pesando el aparato del estado a la hora de traccionar votos y se chocaron con la realidad de una preferencia electoral inmóvil.
Solo un 11,3 por ciento concurrió a las urnas y entre todo el bederismo, el aparato del estado, y hasta el gobierno plebiscitado de Beder Herrera, no pudieron construir una figura que concite o despierte al elector peronista y mucho menos a la clase media o el switcher que es el votante que define la tendencia final de una elección.
El desconocimiento de Casas es alto y se le suma que solo un 7 por ciento responden a la consulta afirmativamente cuando se le pregunta ¿lo conoce personalmente a Sergio Casas?…
Esto sin duda el gobernador riojano lo sabe y hasta armaron spot publicitario, apartándolo de la política y poniéndolo en el lugar del ciudadanos común, diciendo…Sergio es igual a vos…craso error, difícilmente un Político hoy en la Rioja pueda emparentarse al riojano de a pie, salvo alguna honrosa excepción. Más allá de los errores hasta de campaña mediática, la destrucción que le produjo Bosetti a Casas y al propio gobernador fue letal el 8M, recordemos que la propia consultora del gobernador reconoció que estafaron a Bosetti, que no fue a votar nadie y que las elecciones fueron un fraude.
Tal vez los que lo asesoran al gobernador pueden decirle que esto ya quedo en el olvido pero la realidad es que es una sumatoria de hechos que rompen el contrato social entre el que gobierna y el que deposita la confianza para que lo gobiernen.
SI QUINTELA NO ES EL CANDIDATO DEL PERONISMO EN LA RIOJA, MARTÍNEZ SERÁ EL PRÓXIMO GOBERNADOR
Cuando arrancamos este ensayo político, hablamos de matemática electoral y Peronismo y de eso el gobernador riojano difícilmente se aparte, es lo que lo mantuvo en la palestra del poder en la provincia durante estos últimos treinta años.
Beder Herrera sabe que proponerle la vice gobernación a Quintela y que Casas encabece la formula, es depositar el gobierno en manos de Martinez, por todo lo ante expuesto y por qué el electorado que acompaña a Quintela no se movilizara de igual manera teniendo a su conductor en una posición que no es la de Gobernador, distinto es la situación del oficialismo que de plano, con la conducción de Beder Herrera más el aparato garantiza de arranque el 20 a 23 por ciento, que le es propio por el desarrollo de las políticas estatales.
En este escenario de construcción de bipartidismo, que sería lo más sano para ir volviendo a los cauces normales de la democracia e ir dejando de lado el perverso sistema de colectoras, la compulsa peronismo vs radicalismo, diagramaría el retorno de los sistemas de control y alternancia que tanta falta y bien le hacen a la convivencia institucional.
Quintela de Vice Gobernador de Casas, seria remar en dulce de leche, y tener que explicar después de tantas desavenencias, porque hoy Quintela está en esta situación.
El tema es claro, si Casas puede solo, no necesitaría de nadie y más allá de la buena voluntad, estrategia y hasta picardía política del gobernador riojano, es muy difícil imponer a Casas como líder de la provincia, más aun después de un liderazgo casi absoluto del actual mandatario.
La verdad es que el cien por cien del bederismo esperaba la reelección de Beder Herrera, por eso nadie construyo liderazgo y esto no es un pecado político en sí mismo de Casas, Sergio es en definitiva, esclavo o víctima de los fuertes liderazgos y personalismos que se dan en el peronismo, ni el propio Quintela cuenta hoy con un sucesor que movilice voluntades por fuera de su propia figura.
Cuando comienza a asomar la fecha de acuerdos y cierres electorales, vuelve a la memoria el 2013, sin Quintela en la cancha donde el peronismo de Beder Herrera fue derrotado.
Hoy que se juega el poder, la matemática es clara, en la provincia, Martínez llega al 29 por ciento, Quintela al 26 y casas no supera el 12 por ciento y el resto son indecisos. Desde que Quintela puso en marcha el desarrollo territorial en la provincia de cara al 5J, la Capital fue el bastión que lo llevo a equilibrar en la provincia con un crecimiento de más de 7 puntos y sin techo en el peronismo y más si se le suma el acuerdo estructural del oficialismo.
Muchos aspiraban a una construcción de Quintela con Martínez, pero el líder radical adelanto tiempos cerro con Macri y anuncio formula, ofreciendo lo que sobraba a quien, mediante gestos políticos poco usuales ya en esta tierra Federal realizo desde el 2013, las presiones nacionales y demás condicionamientos hicieron que Martínez, alentado por las encuestas se anime y apueste a que Quintela no encabece la fórmula del peronismo riojano o Beder Herrera siga a delante con la idea de hacer de Casas su sucesor sin tener en cuenta que con Quintela a fuera y solo concentrado en mantener la intendencia, el peronismo bederista estará sometido a ver como en los canales nacionales, festeja Macri y Del Sel con lo globos que tendrá que tirar Mashasha.
Matemática peronista, pragmatismo electoral, radicalismo con caja macrista, una decisión que puede reivindicar Beder Herrera llevando al peronismo a un triunfo y Quintela que trabaja en el desarrollo territorial en la provincia, esperando que los melones se acomoden en el camino…
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La verdad que el único que puede ganar es Quintela. Martinez no llega y eso es bueno. PORQUE LA RIOJA NECESITA AL GITANO