Redacción de RiojaLibre
¿Puede alguien ‘festejar’ la llegada de una Pandemia que ya se cobró 270 mil vidas en todo el mundo, 288 en Argentina y 6 en La Rioja?. Si decimos que sí, estaríamos hablando de la ausencia total de humanismo y sensibilidad social en los protagonistas.
Más allá de eso, existe una verdad inapelable: tanto a Fabián Calderón como a Inés Brizuela y Doria la Cuarentena Provisional, Social y Obligatoria, les calló como anillo al dedo. Hoy se cumplen 50 días de ‘aislamiento obligatoria’, y retrocediendo para atrás vemos que el Rector y la Intendenta hoy respiral relativamente aliviados, a diferencia de lo que pasaba aquel 20 de Marzo, cuando tenían la soga al Cuello.
48 horas antes de que el Presidente Decrete la Cuarentena obligatoria, en la UNLaR se estaba gestando una Toma. El malestar, hartazgos, y los movimientos que había por ese entonces hacían recordar a los días previos a la histórica TOMA de Septiembre de 2013 contra Enrique Tello Roldán.
Rocordamos algunas de las imágenes y videos que abundaban en las redes, evidenciando las pésimas condiciones en las que los alumnos debían tomar sus clases. La furia se dirigía siempre hacia Calderón, y hasta se llegó a reunir una Asamblea para definir la Toma:
Esa misma tarde, y adelantándose a la Cuarentena, Calderón definió suspender las clases durante tres días. La bronca e indignación creció entre los alumnos, que tomaron la suspensión de Calderón como un despiadado aprovechamiento de la situación. Luego llegaría la Cuarentena Obligatoria, y las clases aún no vuelven.
En el caso del Municipio Capitalino, el empadronamiento estaba en marcha, y a días de que se Decrete la Cuarentena, casi 500 PEM se enteraron que NO se les acreditaba su salario. En condiciones normales, esas 500 familias se hubiesen agolpado frente al Municipio, reclamando por lo que les corresponde.
Inés Brizuela y Doria y Mariana Catalán (el brazo ejecutor de la Intendenta) aprovecharon el aislamiento social para concretar el terrible ajuste en los PEM, que vienen perpetrando desde que Inés asumió la Intendencia.
Habrá que ver, a medida que se vaya reanudando la actividad, si los Estudiantes de la UNLaR y los PEM mantienen el nivel de bronca e indignación que los invadía a fines de Marzo. Como sea, el Rector y la Intendenta lograron dos meses de gracia para ‘salvarse’ de las respectivas catástrofes que se les venía encima.
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