Redacción de RiojaLibre
Hace más de un mes que la Ciudad no tiene servicio de recolección de residuos regular. Hace dos meses que un grupo de más de 2000 trabajadores precarizados luchan por cobrar el sueldo, tras los ‘pases a planta’ que firmó la Intendenta en las semanas previas de las elecciones. Hace dos años que los capitalinos reniegan diarimente con los baches que se multiplican en las calles de todos los Barrios, situación que se ve exasperadas con las lluvias.
Nada de esto parece importarle a Inés Brizuela y Doria. En las últimas semanas viajó dos veces a Buenos Aires. ¿A Gestionar recursos y soluciones en Casa Rosada? No, a reuniones partidarias con ‘correligionarios’ de la UCR y Juntos Por el Cambio.
Las elecciones pasar, pero Inés Brizuela y Doria sigue haciendo proselitismo, enfocada en lo único que sabe hacer: campaña eterna de cara a la próxima elección.
No está mal que Inés Brizuela y Doria se preocupe y se ocupe por quedar posicionada desde la UCR en Nación, para ser candidata a Senadora o Diputada Nacional en 2023 con la intención de volver al Congreso. Lo que está mal, pésimo -imperdonable- es que Inés Brizuela y Doria no se preocupe y no se ocupe de los problemas de los capitalinos, cargo EJECUTIVO para el que asumió hace dos años y tres días.
A la Jefa Comunal parece que nadie le avisó que está a cargo de la Intendencia, parece que nadie le avisó que las elecciones ya pasaron (y las perdió categóricamente); ella sigue en su juego. Quienes la padecen son los capitalinos. La Ciudad de La Rioja está abandonada, con una Intendencia acéfala.
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