El transporte de pasajeros interprovincial está soportando una “crisis terminal” que se acentúa cada día más, con el deterioro de las unidades con que cuentan las empresas.
Ese diagnóstico lo trazó el subsecretario de Transporte de la Provincia, Carlos Varas, quien dio a conocer los resultados de un operativo de control que se realizó en el acceso norte de la ciudad, donde “se detectaron serias irregularidades”.
El funcionario, señaló que lo sorprendió la verificación realizada, donde se constató: falta de documentación de los vehículos (muchos de ellos sin RTOI); mal estado de las unidades utilizadas para el transporte de pasajeros.
“En esa oportunidad, se detuvieron a dos colectivos que trasladaban pasajeros desde la ciudad de Aimogasta; se los llevó hasta las dependencias de la subsecretaría, y se les labraron las respectivas actas de infracción”, precisó.
Asimismo, manifestó que tras un relevamiento se determinó que están funcionando 500 vehículos en forma irregular en toda la Provincia.
Al respecto, Varas indicó que se seguirán realizando “exhaustivos controles”, e instó a los propietarios de unidades que se lleguen hasta el organismo a su cargo, a fin de conocer los requisitos para el transporte de personas.
“Es fundamental que el pasajero tenga conocimiento que el colectivo que lo transporta, esté en regla”, señaló.
Sin embargo, se quejó por la falta de presupuesto con que se desempeña la subsecretaría de Transporte, y reclamó más medios y personal autorizado para controlar. “Sin fondos es imposible realizar la tarea”, remarcó.
Finalmente dijo que, “ante este panorama, es necesario un rápido accionar de las autoridades pertinentes”.