Estrella: “La escena del crimen no ha cambiado, perdón, la escena del accidente”
Luis Fernando Estrella, el segundo acusado en declarar sus últimas palabras ante el tribunal oral, defendió su inocencia y acusó al fiscal Dario Ibañez de animosidad manifiesta.
“Mientras se me acusa de un hecho que no cometí, yo me ocupaba de los problemas de La Rioja en los que trabaje hasta el fin de 1976”, aseguró estrella. También dudo de la veracidad de la noticia de que el Papa Francisco habría expresado al obispo Colombo que sigue la causa del asesinato de Angelelli: “bastardean la figura del santo padre, diciendo que está interesado en esto”.
“Todos los testigos presentados por la fiscalía coinciden en que la escena del crimen no ha cambiado, perdón, la escena del accidente”, trastabilló Estrella en su relato. Ante el acto fallido, se generó el aplauso de los presentes en la declaratoria. “Es este el contexto histórico que me toca vivir”, expresó como única respuesta ante la manifestación.
Apuntó que el fiscal adhoc Dario Ibañez “ha demostrado animosidad manifiesta a la hora de dirigirse a mi o a los testigos, llevando a responder con preguntas cargadas”, y además lo mandó a leer Filosofía del Derecho Pena II y Filosofía del Derecho, en alusión a prácticas que considera fallidas.
Últimas palabras: Menéndez sostiene que la muerte de Angelelli fue un accidente
Benjamín Luciano Menéndez calificó de pseudo testigos a quienes atestiguaron que un auto encerró a la camioneta que llevaba a Angelelli y Pintos. Negó haberse reunido con el obispo riojano.
Últimas palabras de Luciano Benjamín Menéndez
Uno de los imputados por el asesinato del ex obispo riojano Monseñor Enrique Angelelli dio ante el tribunal oral sus últimas palabras antes de la lectura de la sentencia final que se realizará alrededor de las 15.30. Luciano Benjamín Menéndez negó ser autor intelectual de la muerte del obispo.
Menéndez expresó que sólo exisitó un testigo presencial del hecho, un operario que estaba arriba de un poste realizando un arreglo eléctrico. Según el relato de este, la camioneta que trasladaba a Angelelli y Pintos circulaba normalmente por la ruta, cuando sin motivos se desvío, volcó y dio varios tumbos.
El acusado reiteró que la Iglesia Católica y los tribunales riojanos de aquel entonces coincidieron que la muerte de Enrique Angelelli fue un accidente, expidiéndose de igual forma la Cámara Federal de Córdoba.
“Hasta aquí quedó demostrado que el accidente había sido completamente fortuito”, aseguró el militar. “Sin embargo paralelamente a estas investigaciones se realizó una campaña de la que yo no había tenido ninguna noticia. En esa campaña una cantidad de testigos aparece diciendo que hubo un auto que encerró la camioneta de Angelelli, otros testigos -o pseudo testigos- dicen que el obispo alguien lo había matado a golpes, otros arman tesis sobre un automóvil con varios ocupantes que estaban en el lugar y que siguió viaje sin auxiliar a los accidentados”, amplió.
También negó la existencia de una reunión con Angelelli previa a su muerte, que varios testigos sostuvieron y figura en las cartas que el ex obispo riojano le envío a las autoridades de la Iglesia Católica.
Sus últimas palabras fueron: “yo vine a informar lo que sabía del accidente que es nada, y termino siendo el autor. Todo sin ninguna prueba”.
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