Son muchos los intendentes que al igual que el gobernador Beder Herrera, deben dejar su sillón de poder, porque la firme letra de la Constitución se los impide.
Respecto a eso, el gobernador, para evitar que su imagen continúe en caída, expresó incontable cantidad de veces que no buscará ser candidato a gobernador. Pero, como dice el refrán: “del dicho al hecho, hay mucho trecho”. Tiene preparado un pedido de enmienda en la Constitución, que si bien no será presentado por él, lo harán sus diputados, donde soliciten “tachar” la prohibición de buscar otro mandato a gobernadores e intendentes. Lo dicho: buscan atornillarse a sus sillones.
El gobernador se mostró desinteresado, pero según pudo saber DiarioChilecito.com, se prepara una presentación en Diputados donde el bederismo buscará llamar a elección de convencionales constituyentes municipales, a la vez que el tratamiento de una ley de coparticipación municipal, a pesar que jamás estuvo de acuerdo con ninguna de las dos. Principalmente con la última, ya que le otorga poder absoluto con los 18 intendentes de la provincia, quienes deben obedecer o no reciben dinero para administrar sus municipios.
Una fuente aseguró que “hay un pedido para que toda la estructura bederista de la provincia, apoye el plebiscito, porque saben que si se va Beder, también se van ellos”.
En pocas palabras, el gobernador -antes de octubre de este año- inventará una elección para poder hacer un plebiscito.
Ya comenzó el operativo “convencer a Quintela” para que le otorgue el apoyo en La Rioja capital, donde la política de 2015 se juega una carta muy fuerte.
“Y no les va a ser difícil: Si todos sabemos que Beder modifica la Ley Electoral a su gusto y piacere. El tribunal electoral le responde y él es el dueño de toda la plata de la provincia”, aseguraron.
Para fines de 2015, si el bederismo logra renovar el mandato del gobernador mediante plebiscito y enmienda, existen grandes planes de megaminería en la cordillera. Bajo el pretexto de traer agua del río blanco, ingresarán a la cadena montañosa que nos divide con Chile. “Le quedó la vena en el ojo con lo del Famatina. Se quedó quieto de la boca para afuera, porque el pueblo se puso firme y le puso la pata en el pecho. Pero en realidad no va a bajar los brazos con el oro. Está cegado por todo lo que vio. El poder que se consigue es inmensurable”, agregó la fuente a DiarioChilecito.com
Cabe destacar que si el gobernador lograse ganar un plebiscito donde el pueblo le diga que “Sí” a su re-reelección, la Corte Suprema se vería en dificultades para actuar como lo hizo con Santiago del Estero, porque la reforma estaría “aceptada” por el pueblo riojano.
De ser así, sólo el pueblo puede ponerle un límite a la treta política que se está tejiendo.
Más detalles de la preocupante versión
La situación institucional de la provincia indica que este sería su último mandato por imperio de lo dispuesto en el artículo de la Constitución Provincial y su respectiva cláusula transitoria.
Sin embargo sobre el escritorio del asesor Duran Sabas, están los borradores de la gambeta sin escrúpulos que piensan implementar en la nueva estrategia relacionista y violatoria de la legalidad constitucional, que posibilite contra viento y marea que Beder siga -aunque sea haciéndole pito catalán- a la sociedad toda, y borrando con el codo lo escrito con la mano, cuando en oportunidad de la última reforma constitucional propiciaba la periodicidad en los mandatos y la alteridad en el ejercicio de los mismos.
Dentro de las tretas reeleccionistas, también se analiza la posibilidad de que el Tribunal Superior de Justicia se expida sobre un recurso de certeza presentado por el quintelista Ramón Vera sobre la constitucionalidad de la retroactividad de la cláusula transitoria tercera de la Constitución.
El segundo camino podría consistir en dar luz verde para que la Cámara de Diputados con su mayoría automática de por aprobado el Proyecto de Modificación de los mandatos del legendario Oso Chamía y se abra el proceso para la Enmienda que dispone como recurso el art. 177 de la Constitución Provincial, lo que sería factible porque la Cámara sólo modificaría menos de tres artículos y deberá someterlo a ratificación de una consulta popular que debe realizarse en la primera elección general que se realice.
El problema de la falta de una elección general antes de la elección de Gobernador se arregla cuando el más anti autonomista de los Gobernadores se trague el sapo y convoque para antes de octubre de este año a la Elección de Convenciones Municipales para la sanción de las Cartas Orgánicas Municipales… y cuestión superada; o se reglamente la Defensoría del Pueblo (que desde el año 1986 duerme congelada) y tragándose otro sapo, Beder disponga una elección del Defensor que debe designar luego la Cámara por elección popular. Cuestión de comerse sapos para seguir comiendo la torta… Cosas de Beder.
La última alternativa sería reimplantar la cuestionada ex Ley de Lemas, pero lo mismo debe sortear el art. 120 de la Constitución Provincial.