Redacción de RiojaLibre
Este jueves, Juan José Cano y su hermano Miguel llegaron al juzgado de instrucción ubicado en Pelagio B. Luna, pasados unos minutos de las ocho y media de la mañana; y -tal como te anticipó ayer RL- no se abstuvo de declarar, sino que por el contrario, contó en detalle todo lo sucedido.

Se trató de una indagatoria que parecía la declaración de una víctima, y no del autor material del asesinato. En un momento, Cano miró a la cara al Juez y le dijo: «la vida de mis hijos esta en sus manos». Los ojos vidriosos dominaron la escena y la emoción se apoderó del lugar.
Se pudo ver a un Cano totalmente devastado y emocionado. Afuera, una manifestación pedía su Libertad.
Juan José Cano contó con detalle todo el hecho, y ahora quedará en manos del Juez definir cuál es el grado de su culpabilidad. Cano no dudó en desvincular al resto de los imputados (recordemos que hay cuatro detenidos más), haciéndose cargo del hecho. A su vez, aseguró que el cuchillo con el que mató a Torre lo sacó de la casa de la familia Torres; es decir, no fue con el cuchillo desde su casa.
Cano hizo hincapié en dejar en evidencia una incompetencia y desidia policial alarmante, siendo la causa principal que origina todo lo sucedido.
Respecto al momento puntual en el que da muerte a Diego Torres, Cano aseguró que se nubló: «no era yo, creí que le había pegado en el brazo».