El magistrado Mario Alberto Juliano consideró que no existe posibilidad de convenir si esa práctica puede ser considerada «obscena y contraria a una supuesta decencia pública».
Además, le reclamó «prudencia» a la policía al atender este tipo de casos, a fin de evitar «hechos de violencia».
El fin de semana Necochea estuvo en el ojo de la tormenta luego de que se armara un gran despliegue policial para pedirle a 3 mujeres que se tapen los pechos en una playa. Los videos recorrieron el mundo.
El juez consideró inconstitucional la ley invocada para infraccionar a las mujeres.
Además Juliano advirtió que a partir de la trascendencia que tuvo «resulta buena ocasión para que la legislatura provincial debata y analice la necesidad de reformar el Código Contravencional bonaerense».
A las mujeres sorprendidas en la playa se las había imputado por la infracción al artículo 70 del decreto ley 8031/73, que castiga al que con “un acto obsceno ofendiere la decencia pública” y si fuera realizado en un lugar público.
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Inconstitucional
Juliano dijo que la disposición es “notoriamente inconstitucional”, destacando la “imprecisión” y “vaguedad” de los términos empleados en la ley.
“En el caso concreto no existe la posibilidad material de convenir si el toples puede ser considerado obsceno y contrario a una supuesta decencia pública, para el caso que esta existiera”, señala la resolución.
Agrega que “la lesividad de una conducta de esta índole (descubrirse el pecho) es ciertamente dudosa, y por imperio de lo establecido en el artículo 19 constitucional, los actos que no perjudiquen a terceros se encuentran exentos de la autoridad de los magistrados”.
«El hecho de que una mujer descubra sus pechos no representa un acto objetivamente lesivo para terceros y, por ende, se encuentra exento de la autoridad de los magistrados».
El juez Mario Juliano también reflexionó que «los seres humanos somos los únicos integrantes del reino animal que tenemos serios problemas para convivir con nuestros cuerpos y que hacemos de esas dificultades un buen motivo para enfrentarnos y guerrear».
También sostuvo que «los conflictos con el cuerpo han sido relacionados con la curiosa noción de la moral pública», y desde allí han sido trasladados al ámbito penal para sancionar a quienes se oponen a la visión oficial de qué conductas son aceptadas y cuáles deben ser censuradas.
«La defensa irrestricta de las libertades me lleva a posicionarme en favor de las mujeres que decidieron descubrir sus pechos, del mismo modo que apoyo las manifestaciones (tetazos) que ocurrirán en los próximos días en defensa de los derechos», escribió Juliano.
«Esa es una de las formas (en ocasiones la única posible) de provocar un debate sobre las cuestiones que nos conciernen, del mismo modo que ocurre con otros temas (marihuana, edad de punibilidad, violencia de género) que deben formar parte de una agenda amplia y generosa en la que participemos la mayor cantidad de personas, propio de democracias más deliberativas», agregó.
¿Y a la policía?
De la misma forma, y ante la posibilidad de que se puedan producir nuevos hechos en lo que resta del verano, pidió a las autoridades policiales que “procuren una intervención que priorice la mediación, a los fines de garantizar la libertad de expresión y el ejercicio de los derechos, en un marco de paz y convivencia que evite las expresiones violentas.