La presidenta arribó a Rosario minutos después de las 14 a bordo de un helicóptero presidencial. A la zona de la tragedia llegó en un camión de Gendarmería e ingresó por la calle Balcarce hasta toparse con el vallado que rodea la zona.
Según trascendió, Cristina logró hacer un pequeño recorrido por la zona, caminó unos pocos metros y luego volvió a subirse al camión de Gendarmería que la acercó al lugar. Para salir, el vehículo tuvo que dirigirse por la calle Salta hacia Boulevard Oroño, zona en la que se encuentra el Supermercado «La Gallega», utilizado como centro de operaciones del equipo de rescate.
Allí, de un lado del boulevard, los familiares de las personas desaparecidas aguardan, con la tensión y la angustia del caso, alguna información que los acerque a sus seres queridos. Durante toda la jornada ya habían descargado su malestar con los periodistas apostados en el lugar y así también lo hicieron con la presidenta, a quien despidieron con insultos.
La jefa de estado llegó esta mañana al país proveniente de Nueva York donde se llevó a cabo la reunión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Inmediatamente decidió partir rumbo a Rosario y se subió al helicóptero a las 13.54. Minutos más tarde arribó al lugar de los hechos.
Antes, ya había decretado dos días de duelo nacional por la tragedia. La norma indica que la explosión y derrumbe de un edificio provocó «enorme consternación» en el país y que la medida se toma por «solidaridad y pesar» ante el «dolor de los familiares» de las víctimas.
Al mismo tiempo, tanto el oficialismo como el candidato del Frente Renovador, Sergio Massa, suspendieron sus actos de cierre de campaña para las elecciones del domingo.