Chachi Telesco es una joven actriz que adquirió mucha popularidad cuando participó en el reality de Disney High School Musical, pero fue desvinculada cuando se filtró un video sexual de ella y de quien era su pareja en ese momento. Ese escándalo marcó mucho su carrera. Tras superar ese mal momento, siguió adelante y realizó participaciones en distintas ficciones como Son de fierro, Por amor a vos, Enséñame a vivir, Botineras y Embarcados a Europa.
Ella sintió que necesitaba hacer un giro en su vida y desarrolló una faceta espiritual y solidaria. En diálogo con Teleshow, explicó cómo se hizo voluntaria en la Fundación El Arte de Vivir: «Estaba pasando por un momento de mucha incertidumbre, necesita poner mi arte en un cambio más social. Estaba con mucha queja, me quejaba por muchas cosas. Me llegó una invitación para hacer un curso de respiración de un amigo… y me anoté. Después de cinco días salí con 9 ideas de servicios y a la semana estaba en el primer hospital, ayudando y cantando, actuando para los nenes y las madres».
Las técnicas de respiración y relajación le sirvieron para su trabajo y para los seminarios que da sobre actuación: «Hace tres años doy clases de actuación para no actores, me potenció tanto lo que venía haciendo, cada película y cada serie que filmé desde que estoy haciendo servicio. Lo hago de manera tan consciente (…). Cualquier grito, cualquier estrés, cualquier pelea, no me toca. Me roza, me pasa por al lado. Esa capacidad me la dieron las técnicas del Arte de Vivir».
Como voluntaria, Chachi realiza con un grupo de personas visitas al Hospital Gutiérrez (los sábados y domingos de 10 a 11.30). Al respecto, señaló: «Somos un grupo de voluntarios que enseñamos técnicas de respiración, meditación, cantamos, jugamos y contamos chistes. Les damos un recreo en la mente de las personas que están hace dos o tres meses con sus nenes en terapia intensiva… hay padres, madres y hermanos con un grado de estrés y angustia que varía según la salud de sus nenes».
También contó su experiencia de hacer trabajo social en las cárceles: «Me tocó ir dos veces a la cárcel de San Martín. El programa se llama Prisión Smart. Es un programa de rehabilitación de la conducta que tienen los presos dentro de las cárceles… Las personas que salen de los penales no siempre salen rehabilitadas, en el peor de los casos salen peor y resentidos. Prisión Smart lleva las técnicas de las personas que tienen libertad para bajar el nivel de estrés a la cárcel, funciona hace ocho años. Fue una de las experiencias más fuertes que me tocó vivir, no tenía idea que las personas que tienen problemas tan graves de conducta pueden conocer a través de las técnicas el amor que les faltó en algún momento de sus vidas».
Además, explicó que se sorprendió mucho la primera vez que visitó un penal: «La primera vez que fui a la cárcel pensé que me iba a encontrar con personas con caras muy peligrosas y muy enojados. Pero te reciben con una sonrisa inmensa, un amor y un agradecimiento porque les estás llevando técnicas antiestrés y antiviolencia».
Por último, Telesco manifestó que cualquier persona puede colaborar con la Fundación El Arte de Vivir, haciendo donaciones o realizando trabajo voluntario y aclaró que no hace falta tomar ningún curso para poder participar de las actividades solidarias.