Pero no quedó ahí, la mujer, que tiene otro hijo, agregó: «Mirá lo que hago con tu hija porque no la quiero». El video se lo envió al padre de la pequeña, quien está preso, pero logró difundirlo rápidamente en las redes para denunciarla. Los usuarios pidieron a las autoridades que la condenen y le saquen la custodia.
Efectivamente, a los dos días fue detenida. Los vecinos contaron que ellos la escuchaban maltratar a la gente todo el tiempo. Una vecina dijo que conocía a Tapia desde que esta tenía 17 años y que ya por entonces se la escuchaba gritarle a su madre, después a su marido y ahora a sus hijos.
En una entrevista con el medio chileno 24 horas, Tapia dijo que se arrepentía, pero que fue un momento de ira: «No sé, me sentí mal, me sentí como que me bloqueé. Hay mamás que son peores que yo».
Además, explicó que estaba frustrada con su ex pareja y que le pegaba a la nena «para que le doliera a él». Anteriormente, le había enviado un video destrozando todos sus papeles de empleo, pero quería hacerle más daño y por eso se desquitó con la pequeña.
A las pocas horas fue liberada por orden de la Fiscalía de Santiago hasta que se pudiera formalizar el caso legal contra ella. El capitán de los carabineros, Jorge Mancilla, explicó que el fiscal de turno la había dejado ir porque «el hecho carecía de flagrancia».
Sin embargo, Tapia esta citada a un tribunal en los próximos días donde deberá enfrentar los cargos por violencia intrafamiliar, agravados por la sobreexposición de la menor. Actualmente, los nenes están viviendo con su abuela paterna.
CD.