La doctora Gisela Cejas Mariño, contratada afectada por los despidos manifestó que “estamos tristes porque no es una cuestión de ñoquis, acá se trabaja, todos cumplimos un horario y tenemos asignadas funciones, queremos que se conozca esta injusticia”.
En este sentido, comentó que “fue un manoseo, nos hicieron firmar un contrato dos días antes y hoy nos enteramos que tenemos un telegrama de despido en nuestras casas, se manoseó la dignidad de nosotros como trabajadores es una falta de respeto”.
En cuanto a los motivos de, explicó que no hay ningún motivo certero, “solo fue una cuestión de sacar gente del estado, ni siquiera es gente de un color político porque somos de diferentes partidos, esto es una vergüenza y una falta de respeto”, dijo.
A raíz de esta situación, tanto el Ministerio de Trabajo y la gerencia de empleo cerraron sus puertas al público y no descartan nuevas medidas de fuerza, en solidaridad con los compañeros despedidos.