Cuando promedia la segunda semana del acampe que estudiantes del Instituto Castro Barros mantienen al frente del edificio histórico de la escuela Normal, en reclamo de su devolución para uso educativo, más reclamos se van conociendo con el pasar de las horas.
En la jornada de ayer martes, se difundieron a través de las redes sociales fotografías de las refacciones del edificio sobre calle Copiapó, que reafirman la postura de los manifestantes en cuanto a que sólo se hicieron arreglos superficiales, mientras que aquellas falencias que ponen en riesgo la integridad física de docentes y alumnos siguen estando sin solucionarse. Se subraya de este modo la postura de rechazo manifestada el lunes pasado por la comunidad educativa del Profesorado frente al anuncio del Ministerio de Educación de la conclusión de las refacciones y el reinicio de clases en edificio de calle Copiapó.
Asimismo, los estudiantes dieron a conocer que a los fines de habilitar dos aulas nuevas se quitaron los espacios que estaban destinados a la sala de informática y de video. La decisión fue mal recibida, ya que – explicaron – la mayoría de ellos pertenecen a familias de escasos recursos económicos y no cuentan con computadoras e Internet en sus hogares. Eso, sumado al hecho de que no recibieran las netbooks dispuestas por Plan Conectar Igualdad para los Profesorados, hace que las salas ahora desaparecidas fueran de gran importancia para la comunidad estudiantil.
No se suspendieron clases
Por su parte, funcionarios del Ministerio de Educación recalcaron la necesidad de que se retomen las clases y, para ello, docentes y alumnos del Profesorado vuelvan al edificio frente a la Plaza 9 de julio. Los manifestantes respondieron que las clases nunca se suspendieron, sino que se daban en la calle.
La ya tensa situación se agudizó con el reforzado del vallado que fuerzas policiales hicieron en las esquinas donde se mantiene el acampe. Los estudiantes consideraron que la medida buscaba generar malestar y protestas entre los comerciantes de la zona y la ciudadanía en general, por lo que colgaron carteles disculpándose y subrayando que la decisión no era suya sino del Gobierno provincial.
Lejos de acercarse, los canales de diálogo entre la comunidad del Instituto Castro Barros y el Gobierno provincial parecen más alejados cada día que pasa.
APOYO DEL FRENTE GRANDE
“Cómo no podía ser de otra manera el Gobierno de La Rioja prioriza obras que no solucionan problemas reales y urgentes, dejando de lado aquellos como es el edificio del IFSD “Pedro Ignacio de Castro Barros”.
Como riojanos y como integrantes de la comunidad de esta Provincia, nos preguntamos hasta cuándo este problema será rezagado sin dar una respuesta, cuando sabían que el edificio actual donde funciona (ex Correo) iba a colapsar en cualquier momento.
No podemos ser ingenuos y tampoco faltar a la verdad, vemos cómo el Gobierno gasta irracional e irresponsablemente en la pseudo-restauración del viejo Hospital Plaza, cuando resulta necesario e impostergable brindar una respuesta definitiva a una institución de vital importancia como es el mencionado profesorado, puesto que resulta clave para la formación de los futuros educadores riojanos.
Resulta increíble que con la cantidad de fondos que se envían desde Nación para obras de infraestructura educativa, aún no se haya podido construir un edificio para esta institución o se le otorgue un ala del Edificio de la Escuela Normal (hoy shopping) para que alumnos y docentes puedan desarrollar sus actividades en condiciones.
Apoyamos y nos solidarizamos con alumnos y docentes en la lucha por un edificio digno para el IFSD Pedro Ignacio de Castro Barros, e instamos a todo el pueblo de La Rioja a acompañarlos”.
Mesa Provincial del Frente Grande La Rioja
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