Redacción de RiojaLibre
No se trata de ser fatalistas ni alimentar el pánico, sino de advertir seriamente lo que podría pasar en La Rioja cuando se oficialice el Presupuesto que el macrismo tiene previsto para el 2018. El Presupuesto ya está definido, pero el Gobierno Nacional lo oculta hasta después de las elecciones. El Viernes, en el Congreso Nacional, la Diputada riojana Teresita Madera insistió para que aparezcan las ‘planillas’ con los números, pero los funcionarios macristas se negaron una y otra vez: ‘por ahora no’.
Años atrás, a estas alturas, el Presupuesto ya era conocido en detalle; pero hoy, para el Macrismo mientras más tarde se conozcan los números, mejor. El retraso que provoca el macrismo persigue dos objetivos:
- Evitar el impacto negativo en las elecciones de Octubre.
- Quitar tiempo a las Provincias del Interior para ‘negociar’.
En sus columnas, tanto en Clarín como Canal 13 y TN, el periodista especializado en economía Marcelo Bonelli adelantó, en rasgos generales, cómo será el Presupuesto 2018: «apunta a generar inversiones, profundizar las importaciones y reducir al máximo los subsidios; de esta manera se beneficia Capital Federal como centro de inversiones, pero sufren Provincias del Interior como La Rioja y Catamarca, cuyas economías dependen de los subsidios de Nación y de las fábricas». Un dato para agregar: Bonelli es un periodista cercano al Gobierno, con fuentes fidedignas dentro de la Rosada.
Mediáticamente, el Macrismo prepara el terreno para presentar su Presupuesto. Por una parte, el Domingo por la noche -en el programa estrella del Macrismo- Jorge Lanata presentó un informe que apuntaba a la ‘corrupción en los subsidios’. Enfocándose en los subsisdios para Bomberos Voluntarios, Lanata instaló la sensación de que los ‘subsidios están mal’. Por otra parte, ayer, desde la prensa Nacional se difundió un cuadro con las Provincias cuyas economías más dependen de Nación.
La Rioja se encuentra segunda, solo detrás de Formosa, con solo un 10% de producción local, que mayormente responde a las fábricas del Parque Industrial. En el desglose del artículo se leía claramente como se inducía a ‘estas Provincias’ a fomentar el desarrollo de sus economías para cortar la dependencia casi exclusiva con Nación. El objetivo es claro: empujar a La Rioja a desarrollar la Minería.
Para Macri la solución al problema riojano es sencilla: Desarrollo Minero. Solo así La Rioja podrá autosustentarse, terminando la dependencia de los Subsidios de Nación. En Nación se piensa en un 2018 sufrido para los riojanos para que entendamos que debemos abrir las puertas a la Minería.
Con la facilidad para las inversiones y las importaciones que prevé el Presupuesto 2018, la economía profundizará su sentido centralista. Los pocos capitales que invertían en La Rioja huirán hacia Capital Federal. El Parque Industrial acentuará su crisis y los riojanos dependeremos más aún de Nación.
Casas pide a Nación 5.600 millones para el 2018. Para el 2017 el Gobernador Riojano pidió 4.500 millones, y tras arduas negociaciones y respaldos conseguidos en el Congreso, se logró un aumento de los 1.800 que pretendía Nación a los 2.500 que se terminaron consiguiendo. Sin embargo, durante este año, tanto Casas como Guerra se quejan por la demora en el envío de fondos de esos 700 millones de diferencia. ¿Cuánto recibirá La Rioja en 2018?
En la respuesta a esa pregunta está el destino económico de los riojanos para el año que viene. Los Diputados justicialistas están preparados para el peor escenario: “sinceramente estoy sorprendida por los lineamiento del Presupuesto Nacional 2018, solo propone más ajuste, su única preocupación es reducir el déficit fiscal, pero realizando un brutal ajuste”, apuntó Tere Madera.
Aún sin conocer los números finales, Tere Madera alertó que el proyecto se enfoca en dos aspectos: “uno es seguir quitando subsidios a los subsidios esenciales como la luz, el gas y transporte, con todo lo que ello implica en materia de tarifas, y el otro es recortar el gasto público, es decir los costos que tiene el Estado y temo que por ende van a buscar tocar los empleos públicos para poder reducirlos”.
Se viene un 2018 complicado para los riojanos. Casas sabe que no tendrá esos 5.600 millones que pretende, y si la cifra se reduce a la mitad de las pretensiones riojanas, el año que viene no solo no habría aumentos salariales, sino que se atravesaría una Crisis nunca vista en los últimos diez años.