Redacción de RiojaLibre
Por los resultados de las PASO, y por las Encuestas que se hicieron tras la elección, la Intendenta capitalina sabe que necesita un ‘cambio profundo’ en el electorado para cambiar los guarismos en la General del 14 de Noviembre. Hoy, ocho de cada diez capitalino tiene una ‘imagen negativa’ de la Intendenta. La proliferación de baches, la falta de iluminación en las calles, y la irregular recolección de resiudos hicieron mella en el humor del vecino capitalino.
Allí debe encontrarse la respuesta a por qué, tras las PASO, la Jefa Comunal se mostró más combativa en Twitter. Lamentablemente, también podemos encontrar el origen de la disparatada iniciativa de pasar a Planta a 800 PEM, cuando no hay fondos de respaldo para pagarle los sueldos.
La jugada electoral de Inés Brizuela y Doria es clara: hacer algo, patear el tablero, para que ‘algo cambie’. Es arriesgada la movida, ya que podría volvérsele en contra, pero ‘jugada por jugada’, Inés Brizuela y Doria apuesta sus últimas fichas con este pase masivo a planta. Si logra engañar a los capitalinos, trasladando la bronca e indignación por el ‘no pago de los sueldos’ a los nuevos empleados de Planta, habrá logrado el objetivo.
Si no lo consigue, el solo hecho de ‘embarrar la cancha’ puede aunque sea frenar el descenso de su imagen. Como sea, algunos especialistas en la materia aseguran que, como estrategia electoral, la jugada no es mala.
El gran problema es que se ‘juega’ con el sueño de 800 trabajadores. Para intentar cambiar el rumbo de las elecciones, para remontar algunos puntos en las Encuestas, la Intendenta utiliza descaradamente la ilusión de 800 trabajadores precarizados.
No hay responsabilidad, no hay raciocinio: no se puede pasar a planta a 800 trabajadores precarizados sin acuerdo previo con Provincia o Nación, sin tener los fondos y recursos para afrontar el pago de esos nuevos salarios.
Sucede que cuando la desesperación gana terreno, el sentido común y el raciocinio suelen quedar relegados..
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