Redacción de RiojaLibre
Cuando asumió Néstor Bosetti como Vicegobernador, el Bloque Justicialista se dividió en dos, y hubo improperios de todo tipo entre Diputados y hasta con Tití como Protagonista. ‘Mamarracho’ y ‘Burro’ le supo de decir el entonces Diputado Mario Guzmán Soria al Vicegobernador, quien respondió con -entre otras cosas- Energúmeno y LTA.
El caos fue tal, que en Junio de 2017, los Diputados se unieron y vaciaron de poder al Vicegobernador. Fue entonces cuando Marcelo Del Moral tomó la ‘conducción’ de la Cámara, pero los conflictos seguían siendo moneda corriente: falta de Quorum y denuncias cruzadas con el Vicegobernador.
Llegó la ruptura de Casas con Beder y parecía que todo iba a explotar por el aire. Del Moral perdió el control de la Cámara, y Adriana Olima se hizo cargo de la conducción.
Hubo un antes y un después de Adriana Olima en la Legislatura. Hasta que la famatinense tomó el mando, la Cámara era testigo de escándalos, pelea entre diputados justicialistas, y desorden generalizado. Desde que el Gobernador le encomendó el liderazgo a Olima, la Cámara recuperó la normalidad, y la ‘sangre nunca llegó al Río’, pese a la división de varios sectores en los apoyos para los distintos pre candidatos a Gobernador.
Ante cada embestida hacia el Cuerpo, fue Olima quien salió a poner la cara. Soportó, incluso, el hostigamiento del Vicegobernador, que la denunció penalmente y la atacó reiteradamente desde su Multimedio por algo que hicieron ‘todos los Diputados’.
Olima logró la Paz en la Legislatura, cuidando y protegiendo a cada uno de sus Diputados. Al Gobernador lo protegió más que a nadie: muchísimas veces algunos Diputados intentaron alimentar iniciativas que podrían desestabilizar la gestión del Ejecutivo, y Olima no tardó en persuadir a los compañeros en defensa de Sergio Casas. Si hubo una garante de la gobernabilidad de Sergio Casas, ella es Adriana Olima.
La famatinense fue clave en la candidatura de Ricardo Quintela. Primero para su proclamación (siempre mantuvo imparcialidad y ‘controló’ a los Diputados), y luego para ‘unir’ al Bloque en el apoyo al Gitano. Pese a los constantes intentos del ex Gobernador de ‘persuadir’ a los Legisladores, con el Diario del Lunes, se puede afirmar que todos los Diputados trabajaron para Ricardo Quintela. La máxima responsable de ello es Adriana Olima.
Ahora, por una división y picardía peronista en Famatina, Olima debe dejar su banca en la Cámara. Ya se despidió de sus compañeros, y muchos le susurraron al oído que, sin ella, ‘ya nada será igual’.