«Javier, ¿si o no?», fue la pregunta insistente que acorraló al libertario y lo puso a dar explicaciones sobre los puntos más polémicos de su plataforma electoral, como la dolarización y la libre venta de armas. Massa tomó la iniciativa e impuso los temas: el Papa, las relaciones diplomáticas con China y Brasil y hasta el paso de Milei por el Banco Central, a través de los cuales buscó demostrar que su rival no está preparado para gobernar. «Quiero que me votes para elegir un camino que no es la violencia», fue el remate. El libertario intentó contraatacar con la idea de «casta», pero se lo vio dubitativo.
Massa se adueño del último Debate y Milei se mostró perdido
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