Quedan apenas 73 días para que comience el año 2021, pero en materia política el venidero año electoral ya está en marcha. Los espacios políticos más importantes de la Provincia ya están anticipando los escenarios, y diagramando sus respectivas estrategias. La proclamación de Ricardo Quintela como Presidente del Partido Justicialista parece haber dado el puntapié inicial en la carrera hacia las urnas.
La Rioja renovará dos de las cinco bancas de Diputados Nacionales que ostenta (Julio Sahad y Danilo Flores), y la mitad de la Legislatura Provincial. En este último aspecto, la Elección en Capital, donde se renuevan las ocho bancas del Departamento, se roba toda la atención. Todavía no se tiene certezas sobre las fechas de los Comicios, sobre todo si serán desdobladas las elecciones Provinciales de las Nacionales (como viene sucediendo en los últimos años en las elecciones intermedias), o si se harán de manera conjunta, como ocurrió el último 27 de Octubre.
En cuanto al COVID, hay que decir que no sería un inconveniente, ya que el Ministro de Salud de la Nación –Ginés González García- adelantó que “para marzo del año que viene calculamos que se aplicarán las vacunas de manera masiva”. Esto dejaría el camino allanado para que los comicios locales sean en Mayo o Junio. La última palabra la tendrá el Gobernador.
Diputados Nacionales
En el escenario nacional no hay mayores dudas con respecto a las fechas: las PASO serán durante la primera Quincena de Agosto, y las generales en la última semana de Octubre. Aquí el factor determinante, en el oficialismo, pasa por dilucidar cuál es la relación real entre el actual Gobernador y Luis Beder Herrera.
Una vertiente de Casa de las Tejas asegura que ‘la reconciliación ya se dio y que todo marcha sobre ruedas’. Sin embargo, algunos referentes de peso del Quintelismo son más precavidos y no terminan de abrirle las puertas a Beder en el Partido.
Más allá de las posturas personales de cada uno de los Ministros y dirigentes, todo parece indicar que la situación los excede: solo el Gobernador será quien defina la estrategia electoral que tomará con respecto a Beder. Si Quintela decide que el PJ vaya con una sola lista en las elecciones nacionales, seguramente no tardará en aparecer la foto del reencuentro, y el ex Gobernador jugará por dentro del partido.
Pero hay un segundo escenario posible, más ambicioso por cierto: el PJ con candidato oficial (podría ser Gabriela Pedrali), y el ex Gobernador por afuera del Partido, sin ser oposición, pero marcando algunas diferencias con el oficialismo. En esta variante, la foto ‘Quintela-Beder’ no suma, ya que encasillaría al ex Gobernador dentro de la estructura oficialista, y se podría confundir al elector.
Un dato que debe marcarse al respecto: en las últimas encuestas, Beder Herrera es quien mayor intención de voto tiene en la carrera por la Diputación Nacional. Casa de las Tejas podría aprovechar esta situación para polarizar con Beder, y que las dos bancas en juego queden en manos del peronismo.
Otro factor que juega a favor de esta variable que se analiza en el oficialismo, es que la oposición no tiene candidatos con popularidad en toda la Provincia. Sin Inés Brizuela ni Doria y Julio Martínez (ambos con mandato en un cargo mayor hasta 2023), el radicalismo hace agua: no existe un solo dirigente radical que supere el 5% de conocimiento en toda la Provincia. Hoy por hoy, la única candidata posible para enfrentar al Quintelismo y Beder Herrera, es la ex Senadora y ex Vicegobernadora Teresita Luna.
Algunos alegan que Julio Sahad logró la banca en 2017 siendo un total desconocido, al igual que el triunfo de Héctor Olivares sobre Beder-Quintela en 2015. En ambos casos, los candidatos a Diputado de la oposición iban colgado de otro estamento que es el que traccionaba los votos. Julio Sahad de Julio Martínez (Senador) en 2017 y Héctor Olivares de Mauricio Macri (Presidente) en 2015. El año que viene, el ‘estamento estelar’ es la Diputación Nacional; si la oposición va con un candidato desconocido será imposible evitar el Papelón.
Gaby Pedrali por el PJ, Luis Beder Herrera por Nueva Rioja (con cierto apoyo de Nación y algunos sectores del oficialismo Provincial) y Teresita Luna por Juntos por La Rioja, parece ser –hoy- el escenario más realista para afrontar la elección a Diputado Nacional. Tres peronistas y ningún radical.
Diputados Provinciales
La otra gran elección será la de Diputados Provinciales en Capital. Por el lado del oficialismo vale hacer una salvedad con respecto a las anteriores elecciones intermedias. Tanto en 2013 (Paredes Urquiza) como 2017 (Tere Madera), el primer candidato a Diputado Provincial luego terminó siendo el candidato a Intendente dos años más tarde. Con Beder en la Conducción, varios espacios internos pugnaban por el liderazgo en Capital, y elecciones intermedias tenían el ingrediente extra de ser el punto de partida hacia la elección para Intendente.
Con Quintela en la conducción, ese variable cambia: sea quien sea el candidato a Diputado Provincial el año que viene, el candidato a Intendente en 2023 lo definirá el Gobernador, cuyo caudal político más fuerte está en Capital por sus 12 años en la Intendencia. Nadie podrá discutirle al Gitano (por más que logre un categórico triunfo el año que viene) el candidato a Intendente en dos años.
Es por ello que algunos se animan a ‘hacer a un lado’ de la disputa el año que viene, a ciertos dirigentes que si tienen aspiraciones por la Intendencia, como por ejemplo Armando Molina o Juan Luna.
No habría mayores misterios al respecto: Teresita Madera es la gran favorita para encabezar la lista del PJ. A la actual Vicepresidenta Primera de la Legislatura se le vence el mandato el año que viene, y contaría con el respaldo absoluto del Gobernador para ir por la reelección en su cargo. Aquel acuerdo político que nació en 2017, se mantiene firme por estos tiempos: Quintela y Madera se respetan mutuamente.
En la oposición se repite el problema que surge para las Nacionales: con Inés en la Intendencia, no hay candidato radical con proyección. El único dirigente radical con posibilidades de romper la hegemonía Inés-Julio era el ex Concejal Sebastián Cutrona, pero por un misterioso motivo, la conductora del espacio lo ‘desapareció del mapa’. El oficialismo municipal hará el intento de posicionar un funcionario propio (Nany Salzwedel), pero saben que no hay tiempo, y que solo queda una salvación: Felipe.
Convencer a Felipe Álvarez para que resigne dos años en el Congreso y vaya por la revancha en la Legislatura (obtuvo su banca en 2017 pero no lo dejaron asumir) es la misión que tiene la Intendenta. El radicalismo puro opondrá resistencia, pero la Intendenta ya sabe como persuadirlos: si Felipe viene a la Legislatura, Nany Salzwedel lo reemplaza en el Congreso. El radicalismo riojano recuperaría presencia en la Cámara Baja, que hoy NO tiene.
El tema será como convencer al dirigente que más mide en la oposición a ‘quemar naves’ el año que viene, a sabiendas de que si confirma estar bajo la tutela de Inés en 2021 no podrá enfrentarla en 2023, cuando la Intendenta vaya por la reelección. En la traición a Julio Martínez está la respuesta: ‘venite como Diputado Provincial, y en 2023 voy yo como Intendenta y vos como Gobernador’, sería la tentativa propuesta de Inés Brizuela y Doria.
Quienes conocen a Inés, y sobre todo a su hermano Ramón (operador político del radicalismo), aseguran que existen dos certezas de cara al año que viene: ni Néstor Bosetti ni Guillermo Galván serán candidatos en la lista del Municipio. Bosetti es el dirigente con mayor imagen negativa de la Provincia, y el radicalismo no pagará semejante costo político a cambio de una recompensa comunicacional que cada vez es menor efectiva. En cuanto al Viceintendente, los unió el espanto en 2019, pero las fuertes diferencia entre los Brizuela y Doria y Galván siguen intactas.
Con Bosetti afuera de la lista del Municipio, existe la chance certera de que el ex Vicegobernador vuelva a probar suerte con lista propia. Allí se constatará el éxito de la estrategia política electoral de Casa de las Tejas, que hoy debe soportar sistemáticos ataques de la radio del Vice: Bosetti está cien por ciento encasillado en la oposición a Provincia, y si sale con lista propia le restará votos a la Lista de Inés, y NO al PJ como pasó en 2019.
Por último, habrá que ver cuál es la determinación que toma el ex Intendente Alberto Paredes Urquiza. No es fácil su posición. En el PJ le ofrecerán el tercer lugar en la lista, y en el inesisimo ya le advirtieron que se olvide de encabezar. APU deberá apostar por Provincia o Municipio, sabiendo que en ambos espacios deberá ‘hacer la cola’. No tiene estructura para salir con lista Propia, y estando Bosetti en una ‘tercera opción, esa puerta se descarta; entre APU y Tití no hay piel, no hay química, nunca la hubo ni la habrá.
‘Alberto va a coquetear con la oposición pero va a terminar jugando con el oficialismo, incluso cuarto en la lista, porque no quiere ser Diputado, quiere un lugar el Gabinete, y las elecciones del año que viene son la ventana para poder entrar’, confió a RL un paredista de pura cepa.
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