Según el gobernador, las SAPEM dieron una ganancia de 1.000 millones de pesos. Lo hizo en base a la propia capitalización de cada una de las empresas. El número del gobierno es el siguiente: conformó una SAPEM con 30 millones de pesos y hoy la podría vender a 40 o 50 millones de pesos. Sin embargo, no hay interesados.
Hoy la empresa de distribución de energía eléctrica EDELaR, que pasó a manos del Estado, pierde por mes más de 2 millones de pesos y tiene un déficit de unos 150 millones de pesos. La cifra surge del último balance presentado en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.
Algo similar sucede con Agroandina de Chilecito, otra SAPEM. De acuerdo a una auditoría externa de la empresa internacional BDO, la firma tuvo una pérdida de 60 millones de pesos, luego de la administración de José Luis Bellia. A ello hay que incorporar los millones de pesos que se colocaron para reactivarla.
Internet para Todos está en equilibrio en sus cuentas, pero no recuperó la inversión millonaria inicial. Es decir, el Estado invirtió más de 100 millones de pesos, pero esa cifra nunca volvió a ingresar a las arcas provinciales. Por lo cual, debió actualizar la tarifa y ya está en igualdad de condiciones que Arnet. Por eso, hay tantas quejas por la tarifa.
Aguas Riojanas es otro caso. Por eso, salió fuerte una campaña de cobro, pero toda la inversión sale desde el Ministerio de Hacienda.
Cerdos de los Llanos y Granjas Riojanas no recuperó la inversión. Ambas tienen boca de expendio en la Capital, como un comercio minorista, pese que recibieron más de 300 millones de pesos del Estado.
Agroarauco dice vender aceitunas, pero a granel. Es otra empresa deficitaria debido que no recuperó nada.
La empresa Parque Eólico Arauco no llegó a la expectativa mediática por la venta de energía al país.
Todo surge de un informe interno del gobierno sobre las SAPEM, que alertó a los propios funcionarios que las empresas estatales son un Estado paralelo, ya que el Ministerio de Hacienda debe girar recursos para el pago de sueldos y los gastos de funcionamiento de cada una de ellas.
Sucede con una virtual SAPEM de Villa Mazán que gasta 90 mil pesos mensuales solo para salarios. La lista es extensa con un panorama preocupante por los números crecen al ritmo de la inflación.
Según datos del gobierno, se invirtieron unos 1.100 millones de pesos para conformar las SAPEM. La oposición se atreve a decir que la cifra se duplica. No hay nada claro, como la construcción de una fábrica de botellas, una ladrillera, entre otras tantas.
Lo cierto es que cada mes que Hacienda debe preparar el dinero para pagar los salarios de cada área de gobierno y hace lo propio para cada una de las SAPEM.
Hasta el momento, se lleva girado unos 600 millones de pesos en el 2014, aunque no son números finos, y de ese monto, nada volvió: todavía faltan tres meses para terminar el año.
A mitad de mes, mientras prepara la Quincenita, la Casa de las Tejas debe separar dinero para gastos de funcionamiento de las SAPEM.
Como CEO de las SAPEM está el ex ministro de Salud, Juan Luna Corzo. Ricardo Guerra conoce los números finos en el Ministerio de Hacienda.
Hoy los integrantes de los directorios de las SAPEM triplican los sueldos en blanco de los funcionarios, otro dato que no pasa desapercibido en la clase política.
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