Por primera vez, en las vísperas a la celebración en honor a San Cayetano a la medianoche se hizo una vigilia que incluyó misa a cargo del párroco Miguel Frontera, canciones, serenatas y donaciones (dinero y comestibles) para ser distribuidas en las familias humildes.
La procesión comenzó a partir de las 17 en una calurosa tarde riojana, las imágenes de la Virgen de la Merced y San Cayetano partieron de la capilla ubicada en el barrio San Román, acompañado por una multitud de feligreses cantando “Juntos como hermanos”.
Los fieles recorrieron las calles Vicente Bustos, Gobernador Héctor de la Fuente, Santa Fe, Coronel lagos, pasaje San Cayetano, Roque A. Luna para concluir en el club San Román donde se ofició la misa central a cargo del arzobispo Sigampa.
Los vecinos que estaban incluidos en el recorrido adornaron los frentes de las viviendas con gallardetes de colores y flores. La imagen del santo, se detuvo en el domicilio de varias familias para permitir a las personas enfermas que no pudieron asistir a la celebración pudieran tomar gracia.
IR AL ENCUENTRO CON CRISTO
Sigampa condujo la principal celebración al concluir la procesión, se mostró de buen humor, comentó varias anécdotas cotidianas de su pastoral en la provincia del Chaco y aseguró que goza de buena salud.
Expresó que “la iglesia que expresa muy bien la dimensión humana, de cada uno de nosotros por el pan que nos alimenta y por el trabajo con que conseguimos ese pan”.
Con un ánimo nostalgioso, dijo que estuvo “recordando aquellos tiempos cuando era joven, ahora estamos al final de la vida, pero con esa alegría propia de los que somos hijos de Dios” y destacó la suerte de tener a tres sacerdotes Italo, Miguel y el padre Jorge en la parroquia
Manifestó que “a veces pareciera que con la fiesta patronal termina la actividad de la iglesia, pero no es así porque empieza la gran actividad, la gran misión de la iglesia para eso nos preparamos con la novena”. A partir de mañana (por hoy) abrimos “las puertas de la misión que el Señor nos hace participar”.
“A veces –agregó- los cristianos tenemos miedo de entrar en la misión porque nos informaron mal, o tenemos una mala imagen, pero no tengamos miedo, porque no vamos porque se nos antoja, sino porque Cristo nos guía y vamos con su mandato y el poder de su espíritu”.
Insistió en que “debemos ir al encuentro personal con Cristo, El va abriendo rutas, diciendo por dónde y adónde debemos ir y vamos viendo el camino que va abriendo. Lo fundamental en la novena está en encontrarnos con el Señor, para salir, para que la iglesia no se quede”.
BENDECIDO CON LA SALUD
En otro tramo de la misa, Sigampa dijo que tuvo la suerte de salir de La Rioja en el 85 para ir al norte de Santa Fe a misionar, después lo trajeron a la provincia y después partió al Chaco “me fui feliz a trabajar no para mi, sino para el Señor,”.
Dijo que visitó pueblos donde hacía 35 años no eran visitados por un obispo, es ahí donde “nos bendicen con la salud, gracias a Dios nunca estuve enfermo, pero estoy aprendiendo arpa para ir a tocar arriba!!”.
En el Chaco hace calor, recordó “a los mosquitos hay que tratarlos de Ud! son unos gigantes que pasan por sobre la ropa para chuparle la sangre, son muy molestos! fuera de eso no tuve inconvenientes para visitar los pueblos, participar de las fiestas, para acompañar las comunidades”, agregó.
YO SIEMPRE HICE LÍO
Tras considerar los catequistas como “los primeros evangelizadores” les dijo que “no descuiden a los jóvenes”, el Papa los ha llamado y pidió que “hagan lío”, bueno eso lo hacen siempre, yo también era liero cuando era joven, ahora de viejo no me da cuero!”, acotó entre risas.
“Hay que aprovechar esa insatisfacción en el corazón de los jóvenes porque van a tener la satisfacción más grande cuando se encuentren con Cristo, los líos serán más grandes porque serán indómitos, van a tener fuerza, van a querer ir al mundo a evangelizar con la fuerza del espíritu santo”, concluyó.