Redacción de RiojaLibre
Resulta curioso que desde los dos bandos (paredismo y bederismo), se apelan a los mismos argumentos para defender su postura: ‘hay que respetar la voluntad popular’ y ‘hay que cumplir la ley, hay que respetar las Instituciones’. Para justificar la Toma del Concejo, el paredismo pegó un cartel en cada Sillón de los ediles con la leyenda ‘esta banca es del Pueblo’.
Al ver la imagen uno no puede más que coincidir, ya que es el Pueblo quien elige a sus representantes en el Concejo. Pero surge una duda: ¿cómo se define quién es el Pueblo?. Es el Tribunal Electoral el encargado de contar los votos y consagrar a los 15 Concejales capitalinos. Y fue el Tribunal Electoral quien definió que la banca que dejó vacante Oscar Luna le corresponde a Alfredo Menem.
Desde Noviembre te venimos anticipando en RL que existían dos interpretaciones radicalmente distintas con respecto a esa banca. En el Municipio, basándose en la Ley Transitoria, aseguran que cuando un concejal asume como Viceintendente, quien pierde la banca no es el Partido sino el Cuerpo, por lo tanto debe asumir quien quedó en el lugar 16° en la elección. Desde el PJ sostenían que -tal como pasó en todos los casos hasta el momento- la banca le pertenece a los partidos, y la banca que dejó Luna corresponde a quien le sigue en la Lista por la que Luna fue candidato.
El Tribunal Electoral primó la Constitución Provincial, ratificando que las Bancas son de los Partidos, y proclamando a Alfredo Menem como Concejal. La misma Institución que proclama a todas las autoridades electivas de La Rioja (Gobernador, Intendentes, Diputados y Concejales) proclamó a Alfredo Menem. Esto desató la furia del Paredismo, que inmediatamente Tomó el Concejo para impedir la Jura de Menem.
Planteado así, queda claro que quien no está respetando las Instituciones es el Paredismo. Sin embargo, desde la Municipalidad exponen que el Tribunal Electoral no actúa con Independencia, y sigue los lineamientos que le digita el ex Gobernador Luis Beder Herrera. ¿Curioso no? Cuando el mismo Tribunal Electoral proclamó a Paredes Urquiza Intendente y a los Concejales paredistas SÍ es valedero, pero cuando proclama a autoridades que no convienen al espacio es un Tribunal sumiso a Beder. A las Instituciones hay que respetarlas siempre, cuando nos conviene y cuando no nos conviene.
Se habla mucho de ‘respetar la voluntad popular’. Si se lo hubiese hecho con los 37.000 capitalinos que votaron a Felipe Álvarez como Viceintendente en 2015, ninguno de estos problemas estaría teniendo lugar. Felipe seguiría siendo Viceintendente, Oscar Luna seguiría siendo Concejal (cargos para los que fueron elegidos), y no habría discusión posible sobre cómo ocupar la banca vacante.
Para colmo de males, el Paredismo ostenta minoría en el Concejo Deliberante, sin la posibilidad de ‘no dar Quorum’ (herramienta democrática) para impedir la asunción de Menem. Entonces, debe apelar a iniciativas polémicas y antidemocráticas como la Toma del Concejo. De esta manera solo se puede ‘dilatar’ la agonía, pero no parece haber luz al final del camino.
Situación similar tuvo lugar el año pasado con la existencia de ‘dos concejos paraleleos’ para evitar la interpelación al Secretario de Servicios Públicos Alejandro Buso, e impedir que las nuevas autoridades legislativas (impuestas por el PJ) ocupen sus lugares. ¿Cómo terminó la historia? El PJ hizo valer su mayoría y el paredismo debió aceptar a Ramón Vera y Gerardo Leguizamón como autoridades.
Sin mayoría en el Concejo y con la Institución fallando en contra, el Paredismo parece no tener escapatoria. Es por ello que uno se pregunta cuál es el propósito de la Toma y de las rimbombantes declaraciones, ya que al fin de cuentas no harán más que exponer su debilidad cuando -al fin y al cabo- termine asumiendo Alfredo Menem.
El Municipio puede apelar el fallo ante el Tribunal Electoral, pero no habrá cambios. Le queda otra instancia: Tribunal Superior de Justicia, donde uno de los Integrantes es Mario Pagotto, Presisdente del Tribunal Electoral. No habrá cambios y se sostendrá la Proclamación de Menem. La Corte Suprema queda descartada ya que esa entidad respeta las Autonomías de las Provincias.
En el Concejo, cuando Paredes Urquiza y el Viceintendente Oscar Luna regresen a la Ciudad, el PJ recuperará la mayoría y Quorum propio, procediendo a la Jura de Alfredo Menem.
El resultado parece estar escrito: mientras la confrontación sea Ley Transitoria vs Constitución Provincial, siempre terminará imponiéndose la segunda. Otra sería la historia si el Municipio tuviese su propia Carta Orgánica, que le posibilitaría conformar un Tribunal Electoral Municipal. ¿Será ese el fin del ‘Circo’ montado por el Paredismo? ¿Presionar socialmente para posibilitar y reflotar el debate sobre la Carta Magna para el Municipio?
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