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Redacción de RiojaLibre
Cada vez que se produce una represión surge el mismo debate: el rol del Policía. Muchas veces estos ciudadanos tienen ganas de estar del lado de la gente, pero su trabajo los enfrenta. Esta vez, el escenario presenta un agravante: esas chicas a las que están reprimiendo seguramente serán las mismas que comenzarán a educar a sus hijos.
Se espera que haya más protestas, acampes y medidas de lucha. Por eso, le pedimos a todos los policías que antes de ‘obedecer’ la orden lo piensen dos veces: ¿Con qué cara van a mirar a esa alumna que hoy golpean dentro de unos años cuando le dejen a su hijo para que lo cuiden?