El balance es positivo, más allá de haber abandonado en la etapa 4, por problemas eléctricos en el cuatriciclo, fue la carrera más difícil de la historia yo la sufrí caminos muy duros, pero eso es el Dakar.
La carrera no es lo que se ve en televisión, hay dos grupos de pilotos los elite y los concurrentes este grupo no tiene los mismos privilegios, te cuesta todo el doble.
“También observe la poca solidaridad que hay entre los participantes, vas pisando cabeza sos voz nada mas, en ese momento valoras mucho a tu familia”. “Para el año que viene no siento la necesidad de tener una revancha, porque estoy tranquilo deje lo que tenía que dejar todo”.
Además agradezco a mi familia, el Gobernador y mis amigos, “al Dakar lo sufrí mucho”, concluyo el piloto Marcos Prina.